Otro lunes negro
Como ocurre casi siempre en los mercados, llega un momento en que las subidas se convierten en costumbre. Es cuando empieza el peligro. Hace solo unos meses era habitual escuchar lo de que 'el ladrillo nunca baja' refiriéndose al mercado inmobiliario. Insinuar lo contrario era una auténtica herejía. Pues ya vemos que baja. Decir que las bolsas ganan también es políticamente incorrecto en la España del ladrillo, pero, aunque no se comente, la gente se acostumbra a ganancias de dos dígitos como si fuera lo más normal.
Este es el contexto en el que hay que situar lo que está pasando en los mercados de valores. Tras años de bonanza aparece una amenaza seria. La explicación generalmente aceptada sobre que la crisis originada por impagos en los créditos subprime y por la recesión hipotecaria se traslade a la economía en general, con el agravante de que los bancos centrales tengan las manos atadas para bajar los tipos de interés porque el nivel de inflación les impida hacerlo, es correcta, pero lo que subyace es el mismo proceso de siempre: excesos bursátiles (Terra o Astroc son sólo dos ejemplos) y excesos en la concesión de crédito. Y un día algo o alguien recuerda al sistema que vive en un exceso y todo el mundo se amontona hacia la salida.
¿Que va a ocurrir? También lo de siempre. Las bolsas tendrán que purgar sus excesos, lo cual puede ser relativamente rápido porque, al contrario de lo que ocurre en el mercado inmobiliario, en bolsa el descuento de expectativas es muy rápido. Luego todo dependerá del ritmo en que vuelva la confianza al sistema crediticio. Si tarda mucho, el daño sobre la economía real será grande y tendremos un mercado bajista que puede durar meses o incluso años.
El papel de los bancos centrales será crucial. Si las autoridades monetarias actúan rápido y con energía limitarán el daño. Nuestro consejo: al inversor agresivo con visión a largo plazo, que aproveche para hacer cartera. Al resto, que espere a que se establezca una tendencia clara, incluso bajista (también se puede ganar a la baja con fondos de inversión). Hay una amplia oferta de fondos para esperar de forma rentable, liquida -en estas situaciones es importante tener liquidez- y fiscalmente más interesante que usar depósitos bancarios.
Víctor Alvargonzález Consejero delegado de Profim, firma especializada en el asesoramiento en fondos