'Entran placas solares a España que no producen lo pactado'
El directivo alerta de las diferencias de calidad entre las placas solares fotovoltaicas que llegan a España y la importancia de los controles de calidad antes de completar la instalación. Su empresa busca posicionarse en este nicho de mercado del control y el asesoramiento
Los contratos de tres hojas' son la imagen que utiliza José Luis Galindo, presidente de Enertis Solar, para llamar la atención sobre los acuerdos de compraventa de placas solares fotovoltaicas que se cierran sin garantías fiables de calidad y durabilidad. Son una realidad que Galindo ha tenido ocasión de ver en varias ocasiones durante su corta vida empresarial dedicada al control de calidad de los módulos fotovoltaicos. Formado en la construcción, el directivo creó Enertis Solar hace un año al ver 'un sector de futuro' en las energías renovables. La empresa se ubica en un campo que, para Galindo, aún está vacío. 'Faltan asesores de productos, controles de calidad e industria auxiliar', explica Galindo
¿Están detectando diferencias reales de calidad entre productores de placas solares? ¿Llegan a España estas distinciones?
Todos los módulos llegan bajos de potencia, da igual quién sea el fabricante. Producen lo justo que dice en las especificaciones. Pero eso no quiere decir que vengan mal. El problema son los módulos que entran en España y producen menos de lo estipulado. Si el promotor afectado ha comprado mal, con esos contratos de tres hojas, es imposible hacer valer las garantías.
'Nuestra meta es ser un laboratorio de referencia en I+D dentro y fuera de España'
'Una fisura interna puede disminuir la capacidad de la placa en un 3% en 15 días'
Hay que asesorarse sobre el producto, dónde comprarlo y a qué precio. Incluso las grandes ingenierías pueden necesitar asesoramiento sobre la mejor tecnología, el producto, el coste, las garantías necesarias. Las posibilidades de que los módulos den problemas son muchas y el coste de las consecuencias es muy alto.
¿A qué consecuencias se refiere?
Un módulo que venga con fisuras provocadas por la manipulación en el transporte y que no se ven a simple vista, puede disminuir su capacidad de producción en un 2% o 3% en los primeros 15 días. Y se deteriorarán más rápido en el tiempo. Esto puede suponer que esta instalación no amortice sus pagos a tiempo. Hay que asegurar que el parque solar tiene el rendimiento que se le ha dicho al promotor, al cliente, al banco... Es necesario asegurar la durabilidad de los módulos.
¿Tiene que ver con los productores asiáticos?
No necesariamente. Hay malos y buenos productores en todas partes. Nosotros nos desplazamos constantemente a China y sabemos dónde comprar y qué garantías pedir. Hay que conocer a los fabricantes locales.
¿Ese es el trabajo de Enertis Solar?
Nosotros realizamos varias labores dentro de la cadena de valor. Realizamos asesoramiento en el producto y en las condiciones de suministro pero hacemos mucho trabajo de investigación. Trabajamos con el sector en busca de la tecnología más puntera y tenemos los mejores aparatos para realizar grandes controles de calidad módulo a módulo, antes de completar la instalación para validar la calidad y la producción de energía, en el marco de las grandes plantas previstas en nuestro país. Nuestro objetivo es ser un laboratorio de I+D y calidad de referencia en el sector dentro y fuera de España.
Además, realizamos cierta labor de distribución de producto. Suministramos placas solares. Es una rama independiente de la empresa que tiene mucho volumen de negocio pero deja muy poco margen. En realidad, nos sirve para ponernos en el mercado.
Tenemos una cartera de unos 40 clientes, con proyectos ya contratados por valor de 10 millones de euros. Hemos cerrado el año con una facturación de 3,5 millones.
Dice que quiere ser referencia también fuera de España. ¿En qué países pretende tener presencia?
El negocio que queremos exportar es una especie de almacén en el que el cliente de una gran instalación nos envía sus módulos, nosotros le revisamos la calidad y se lo vamos enviando según lo va necesitando. Una instalación de 10 MW puede suponer unos 70.000 módulos. Nuestros mercados naturales a corto plazo serían aquellos con un objetivo alto para la solar fotovoltaica y una regulación que lo remunere. Nuestro lugar está en Italia y Grecia.
A medio plazo, nuestro interés está en Australia y Latinoamérica. Estos países no tienen aún proyectos y queremos participar en la definición de su mercado.
¿Entrarán en los mercados solos o acompañados?
Yo creo que hay que entrar de la mano de socios locales. Hemos iniciado conversaciones preliminares en Australia y en Latinoamérica. En este último, barajamos más posibilidades. En Australia, los contactos están algo más avanzados. También querríamos encontrar una empresa grande, con un negocio complementario al nuestro, que ya haya salido fuera, que nos acompañe en nuestra expansión.
La pequeña instalación se convierte en la tercera pata
El día que no quede hueco para las grandes instalaciones, las pequeñas plantas en las cubiertas de los edificios o las naves industriales será la clave para el desarrollo y crecimiento del sector. 'Tenemos intención de estar en estas plantas integradas en la construcción, que impulsa el Código Técnico de la Edificación, pero ampliando el trabajo que hacemos ahora', afirma Galindo.El directivo detalla que incorporará en su negocio la capacidad de desarrollar el diseño y la instalación de los proyectos llave en mano para el futuro. 'Mientras los demás sigan este año en las grandes instalaciones, nosotros queremos coger experiencia en integración arquitectónica y naves industriales. Tenemos que trabajar en la búsqueda del mejor procedimiento y la tecnología', explica.