Francia condena a Total por la marea negra del 'Erika'
El Tribunal Correccional de París declaró ayer responsable al gigante francés Total del hundimiento del petrolero Erika en diciembre de 1999, y ordenó que la compañía pague daños por uno de los peores desastres medioambientales de la historia de Francia. El tribunal reconoce en su fallo la existencia de un perjuicio 'resultante del atentado contra el medio ambiente'.
Total, el cuarto grupo petrolero del mundo, ha sido multado con 375.000 euros (la máxima cantidad estipulada para este tipo de infracciones) y ha sido condenado a pagar una parte de los 192 millones de euros en daños que recibirán las partes civiles, incluido el Estado francés. Rina, la compañía de certificación marítima que declaró que la embarcación de bandera maltesa era apta para navegar, deberá pagar la misma cantidad. Por su parte, el propietario del barco y el gestor deberán pagar 75.000 euros.
El Erika, el oxidado petrolero fletado por Total, se rompió en dos y se hundió en aguas del golfo de Vizcaya a unos 70 kilómetros de la costa francesa el 12 de diciembre de 1999, vertiendo parte de las 20.000 toneladas de sustancias tóxicas que llevaba en el mar. El accidente contaminó 400 kilómetros de playas y costas, afectó a las industrias locales de pesca, turismo y producción de sal y mató a decenas de miles de aves marinas.
La sentencia fue acogida como una 'gran noticia' en las asociaciones ecologistas al sentar un precedente jurídico cuando se trate de evaluar en el futuro los daños causados a seres vivos, más allá de los perjuicios económicos derivados de este tipo de accidentes.