Muji expande en España su fórmula comercial antimarca
El grupo japonés, presente en todo el mundo, abre su primera tienda en el centro de Madrid.
El día de Nochebuena abría sus puertas la primera tienda de Muji en Madrid y la tercera que la compañía japonesa tiene en España. Los clientes atestaron el establecimiento y muchos quedaron fuera, en la calle Fuencarral, una de las vías comerciales más antiguas de Madrid, ahora convertida en foco de la modernidad.
Las ventas logradas aquel día, en apenas tres horas, superaron los 10.000 euros, como recuerda Joaquim de Toca Andreu -tercera generación de una de las sagas empresariales más importantes de Cataluña- propietario del 80% de Muji España y responsable de su expansión en nuestro país. El 20% restante es propiedad del empresario Enrique Puig Planas.
Muji es, además de una marca con reconocimiento global, la abreviatura del nombre completo de la compañía Mujirushi Ryohi, que significa 'productos de calidad sin marca'. La ausencia de marca es una marca en sí misma; es la filosofía que sustenta este modelo comercial que ya cuenta con 320 tiendas en Japón, más de 50 en Europa y varias en EE UU.
A España llegaron de la mano de Joaquim de Toca, viajero y entusiasta de Muji, que en 2004 envió un email a la sede de la compañía en Tokio, proponiéndoles expandir su idea comercial en nuestro país. Así en 2006, Muji España abría su primera tienda en Barcelona, en plena Rambla de Cataluña. Y poco tiempo más tarde, otra más en el centro comercial L'illa Diagonal en la misma ciudad.
Según avanza De Toca a Cinco Días, 'las previsiones de cierre de ventas de Muji España para 2007 son seis millones de euros, a cierre de ejercicio'.
Desde los centros que Muji tiene en Tokio y Londres, salen los diseños de los productos que componen su amplio catálogo compuesto por 7.000 referencias disponibles en Japón y más de 2.000 en el resto del mundo. 'También contamos con diseñadores de renombre, si bien deben renunciar por contrato a ser reconocidos con su nombre'.
Son productos pensados para el uso cotidiano en casa, el trabajo o el ocio. Una gama que va desde utensilios de cocina o material de oficina, electrónica o ropa para el hogar, hasta muebles y productos de belleza. Utilizan materias primas provenientes de cualquier parte del mundo, y se fabrican en múltiples países, 'aunque siembre bajo criterios de sostenibilidad y responsabilidad social', puntualiza De Toca.
'La filosofía Muji está en todos nuestros productos, que son de utilidad para la vida diaria, tienen diseños funcionales, colores básicos y neutros y ofrecen una buena calidad a precios razonables', asegura el directivo.
La idea surgió en los años ochenta, cuando los grandes almacenes Seiyu, hoy propiedad de Wal-Mart, iniciaron la productos de unos 40 productos 'todo valor, nada superfluo' en contraposición a la marquitis y la ostentación tan característica del consumidor nipón. Una década más tarde, el éxito de su primer córner en la tienda de Liberty, de Londres, propició la expansión al resto de Europa que ya supone el 11% de las ventas del grupo y en la que España juega un importante papel con próximas aperturas.