Francia baraja actuar junto a Italia y España en la expulsión de inmigrantes ilegales
En una rueda de prensa multitudinaria, ante más de 200 periodistas, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, aseguró que se está planteando, junto a Italia y España, la organización de operaciones de 'expulsión colectiva' de inmigrantes en situación irregular. Sarkozy no explicó en que consistirán esas acciones ni como se organizarán, aunque sí precisó que los gobernantes italiano y español 'me lo han pedido'.
El presidente de la República fue más allá en sus peticiones en materia internacional y solicitó que el G-8 (el grupo de los 8 países más industrializados) se amplíe a trece miembros para dar cabida a países emergentes como China, India, Brasil, México y Sudáfrica.
Sarkozy no perdió la oportunidad de volver a reclamar, como ha hecho en los últimos meses, al Banco Central Europeo que anteponga el crecimiento económico al control de la inflación dentro de su política monetaria. 'Si tenemos que elegir entre un crecimiento de los precios o de la economía francesa, sin duda prefiero una inflación temporalmente más elevada y un crecimiento más alto', puntualizó ayer la ministra de Economía, Christine Lagarde.
En el terreno doméstico, el presidente francés expresó su deseo de que 2008 suponga el fin de la semana laboral de 35 horas, aprobada en 1998 cuando los socialistas estaban en el gobierno.