La confianza del consumidor en la economía española, en mínimos históricos según el ICO
El crecimiento de la inflación, la subida de tipos de interés y la crisis de las hipotecas de alto riesgo han hecho mella en la confianza de los consumidores españoles, que en diciembre bajó 3,8 puntos y a lo largo del año pasado cayó 13,2 puntos.
Según los datos del Instituto de Crédito Oficial (ICO), este descenso del Índice de Confianza del Consumidor (ICC), que se situó en 72,3 puntos frente a los 85,5 de diciembre de 2006, se debió a la caída tanto del indicador que mide la percepción sobre la situación actual de la economía como del que calcula las expectativas, que bajaron 5 y 2,5 puntos, respectivamente.
La percepción de la situación económica actual fue en diciembre la peor de la historia de este indicador (elaborado desde el segundo trimestre de 2004), al experimentar un deterioro en todos sus apartados, excepto en las expectativas del empleo, que se mantuvo estable respecto a noviembre. No ocurre lo mismo si se compara la evolución de la opinión sobre el mercado de empleo, en el que se comprueba un fuerte deterioro a lo largo de 2007, con un descenso superior a 18 puntos, y que presumiblemente será aún peor a raíz de los malos datos de la ocupación en 2007.
A pesar de ello, Aurelio Martínez, presidente del ICO, auguró que la confianza de los consumidores se recuperará tras la caída 'excesivamente acusada' de los últimos meses. 'La percepción de los consumidores está influida por las noticias que dan los medios económicos, especialmente las que tratan sobre las turbulencias financieras, que no están explicando bien lo que ha pasado'.
La peor parte se la lleva la percepción actual sobre la situación económica del país, que empeoró progresivamente en 2007, en el que ha pasado de 93,8 puntos en enero hasta 45,4 en diciembre. El secretario de estado de Economía, David Vegara, restó importancia a estas cifras al asegurar que este indicador 'es uno más' entre muchos que hay y tiene una historia 'relativamente limitada', ya que se elabora desde 2004. En su opinión, el deterioro de la confianza ha sido 'contemporánea' a las turbulencias financieras y a la subida de los tipos de interés, 'que afecta especialmente a las familias con hipotecas'.