La alta velocidad llega a Málaga y a Valladolid
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, llegaron a la estación María Zamabrano de Málaga a las 12.35 horas, ya que en la estación de Córdoba el tren hizo una parada de más cuatro minutos.
Allí, en Córdoba, invitados a subir al tren por el presidente del Gobierno, se incorporaron a la delegación el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, y el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos.
El titular de Exteriores estaba esta mañana en la estación de Atocha pero se subió al viaje inaugural en Córdoba, ciudad por la que se presenta en la listas el PSOE en las próximas elecciones.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó que ¢el AVE acerca Málaga al mundo¢ y ¢la colocará entre las grandes capitales del Sur de Europa¢. Además felicitó a la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, por la realización de este proyecto, ya que, ¢gracias a su acreditada tenacidad, ha sido realidad en plazo¢.
En realidad, el tramo que hoy se inaugura es el que va de Antequera a Málaga, de 54,5 kilómetros que tarda en recorrerse 26 minutos, y permite que la Alta Velocidad llegue hasta la Costa del Sol. La línea que une Córdoba con Antequera ya estaba en funcionamiento desde el 16 de diciembre, aunque con trenes Talgo 200.
El tren Siemens 103 llegó a superar los 300 kilómetros por hora, lo que provocaba ciertos vaivenes para los pasajeros. El tren no llegó a coger los 350 km/h que alcanza esta serie S-103, que es la más rápida que va a circular por las vías españolas de alta velocidad.
Alta velocidad a Valladolid
La línea de alta velocidad ferroviaria entre Madrid y Valladolid, inaugurada por José Luis Rodríguez Zapatero, representa para el presidente del Gobierno un símbolo de modernidad, de cohesión territorial y de la buena marcha de la economía.
Es lo que expuso en su intervención en el acto celebrado en la capital de Castilla y León para celebrar esa inauguración y en el que estuvo acompañado por la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, y por el presidente de la Comunidad, Juan Vicente Herrera.
Otra presidenta autonómica también del PP, Esperanza Aguirre, se acercó hasta la estación madrileña de Chamartín junto con el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, para despedir a Zapatero en el viaje inaugural.
Menos de media hora después y tras atravesar los 28,4 kilómetros del túnel de Guadarrama, la nueva estación del AVE en Segovia era la primera etapa de la jornada, y, en ella, Zapatero afirmaba que la historia de esta ciudad ¢empieza de nuevo¢ con la alta velocidad.
El segundo trayecto tuvo como punto y final la estación vallisoletana de Campogrande, donde, de forma más pausada, el presidente del Gobierno hizo una serie de reflexiones sobre lo que supone esta nueva línea.
Un símbolo para la España de la cohesión y para la convivencia, y, a su juicio, una muestra de la buena salud de la economía española porque, con el superávit actual, se podrían acometer cinco obras de las mismas características que la puesta en marcha hoy.
No faltaron los reconocimientos a la labor del Gobierno presidido por José María Aznar, ya que a ello se refirieron tanto Zapatero como la ministra de Fomento, y a la colaboración existente entre las administraciones para hacer posible una obra ¢de país¢, según el jefe del Ejecutivo, quien recordó a los cuatro trabajadores muertos durante las obras de esta línea.
El viaje inaugural del AVE a Valladolid alcanzó los 301 kilómetros por hora y supuso la puesta en marcha de una línea en la que ha habido 55.487 kilómetros de pruebas durante veinticinco meses, el mayor periodo de todas las líneas de alta velocidad que están en funcionamiento, según Fomento.
La línea Madrid-Valladolid, de 179,5 kilómetros, acorta también el tiempo de viaje con el norte de España y ha supuesto una inversión de 4.500 millones de euros, 1.600 de ellos destinados a los túneles de Guadarrama, los más largos de España, los terceros de Europa -según la ministra- y los quintos del mundo.
Viajar en clase turista cuesta entre Madrid y Segovia 20,60 euros por trayecto, y 24,70 entre Segovia y Valladolid, mientras que si se compra ida y vuelta, el precio será de 32,96 y de 39,52 euros. Sin embargo, adquiriendo los billetes por internet y con antelación es posible encontrar un pasaje entre Valladolid y Madrid por 12 euros