Los empleados ya controlan el 4,88% de Bankinter tras la conversión de bonos
Como era de esperar, el consejo de administración de Bankinter no tomó ninguna decisión sobre la posible entrada de Crédit Agricole en el máximo órgano de gobierno de la entidad. Esperará para ello a que el Banco de España apruebe la compra del 20% (ampliable al 29,99%), del capital de Bankinter por parte del grupo francés.
Sí adoptó una decisión que indirectamente afecta a este proceso, y sobre todo a la lucha de poder que mantienen Jaime Botín, aún primer accionista de Bankinter con el 16,3% y que también ha pedido autorización para llegar al 29,99%, y la entidad gala.
Bankinter ha aprobado aumentar su capital en 9,014 millones de acciones para realizar anticipadamente la conversión de obligaciones en acciones en manos de los empleados, lo que representa el 2,27% del capital del banco.
La entidad indicó que el acuerdo se adoptó en consideración al grado de maduración de ambos programas, que han cumplido sustancialmente su finalidad de dar acceso a gran parte de la plantilla al capital social de la entidad. Tras esta conversión los trabajadores de Bankinter controlarán el 4,88% de Bankinter, lo que les convierte, si aglutinan todos sus títulos, en los cuartos accionistas, aunque existen otros dos o tres inversores que controlan ya más del 3% de la institución que preside Pedro Guerrero.
El actual consejo de administración de Bankinter apoya a Jaime Botín como principal accionista, ya que desconfían de que las intenciones de Crédit Agricole sean puramente financieras y, por lo tanto, no descartan que en un futuro quiera lanzar una opa, a la que se oponen. Los empleados también apoyarían, en caso de tener que decantarse por una parte o por otra, a Botín. Entre el consejo y los empleados suman ahora más del 31% de Bankinter.
El Banco de España, mientras, ha pedido más documentación a Crédit Agricole ante su petición de subir al 29,99% su participación en el grupo español. Las acciones de Bankinter cerraron ayer a 13,11 euros.
De cualquier forma, se espera que el supervisor se pronuncie sobre las peticiones de Botín y Crédit Agricole en la segunda semana de enero.