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Medios

El Gobierno pagará a RTVE lo que no financie con publicidad

El Estado subvencionará todos los gastos que RTVE no logre cubrir con sus ingresos comerciales (básicamente, publicidad), según el mandato-marco aprobado ayer en el Congreso. Un modelo más flexible para el grupo que el propuesto inicialmente por el PSOE, que limitaba la compensación 'únicamente' a los gastos ocasionados por la labor de servicio público.

El Estado, finalmente, subvencionará todos los gastos en los que incurra RTVE y que la corporación no pueda compensar con los ingresos procedentes de su actividad comercial (publicidad y venta de derechos o productos con licencia). La razón: se considerarán costes asociados a la labor de servicio público que presta el grupo.

'El coste neto del servicio público prestado se determina por la diferencia de los costes totales de cada sociedad (de RTVE) prestadora del servicio público y sus ingresos de actividad comercial'. Esta cantidad es la que compensarán las arcas públicas según el artículo 45 del mandato-marco de la corporación, que el PSOE logró aprobar ayer en la comisión mixta Congreso-Senado de RTVE con el apoyo de CiU, IU y Entesa, y el voto en contra de PP, PNV y ERC. Este documento es el que fija los principios generales que deben regir en la corporación durante los próximos nueve años. Su aplicación, que se concretará en contratos programa trianuales, se iniciará en 2008.

Este concepto de coste del servicio público es el que ya está recogido en la Ley de la radiotelevisión pública que el Parlamento aprobó el año pasado. La norma puso fin a la posibilidad que tenía RTVE de recurrir al endeudamiento para sufragar sus actividades y fijó un modelo financiación mixto: ingresos comerciales y subvención estatal por el servicio público que presta el grupo. Los Presupuestos de 2008 prevén una aportación estatal de 502,6 millones y unos ingresos de 780 millones (722 millones por publicidad).

Sin embargo, la primera intención del PSOE fue elaborar un mandato-marco que fijara unas condiciones de financiación más estrictas. Así, la propuesta presentada por los socialistas el pasado mes de agosto al resto de grupos parlamentarios señalaba que el Estado compensaría 'únicamente los gastos ocasionados por el cumplimiento de la obligación de servicio público, claramente definida en el presente mandato-marco y en el contrato programa'.

Además, remitía al contrato programa para fijar los parámetros para la compensación estatal y apuntaba que la valoración debía ajustarse 'a los precios medios de los productos audiovisuales del sector'. Y añadía una salvaguarda más: 'En ningún caso, las aportaciones del Estado a la actividad del servicio público podrán satisfacer las necesidades económicas de la oferta comercial de modo que representen un factor de distorsión objetivamente demostrable en el mercado'.

Todas estas consideraciones han desparecido del texto aprobado ayer, estableciendo un marco presupuestario más flexible para el grupo público. Eso sí, el nuevo documento exige a RTVE que elabore en tres meses un código de conducta comercial que deberá estar avalado por Bruselas y establece que no podrá ceder ni comercializar a un tercero más de un tercio del soporte publicitario.

Hay otros aspectos que tampoco ya figuran en el documento final. Así, se ha eliminado la obligación de que RTVE cuente con una unidad de auditoría interna. También se ha suprimido la referencia explícita que se hacía al consejo de administración como responsable de la gestión del grupo. Además, en los contratos programa que se elaboren cada tres años, el consejo ya no tendrá que establecer el número de trabajadores fijos para cada uno de los centros de trabajo de RTVE, sino sólo el porcentaje máximo de empleo 'coyuntural' previsto para garantizar los objetivos del grupo.

Para su visto bueno definitivo, el mandato-marco debe sortear, todavía, dos trámites parlamentarios: su debate y votación en el pleno del Congreso (el próximo 11 de diciembre) y en el pleno del Senado (13 de diciembre). En este paso, las Cámaras no podrán modificar el texto aprobado ayer.

Radio 4 se mantiene

El mandato-marco incluye a Ràdio 4, la emisora en catalán de RNE, como parte de la corporación, lo que supone dejar atrás el cierre previsto en el plan de saneamiento. Según la SEPI, Ràdio 4 era la emisora 'más cara' de la radio en España, con sólo 8.500 oyentes.

Las cifras

780 millones de euros son los ingresos presupuestados para RTVE por sus actividades comerciales en 2008.662 millones es lo que la corporación espera facturar por publicidad en 2008, tras el recorte de 60 millones que sufrirá por la reducción en un minuto del tiempo de emisión de anuncios.60% de la emisión de la oferta generalista de RTVE será de producción interna, según el nuevo mandato-marco.

Revisión a la baja de la producción

Por primera vez en la historia, RTVE tendrá que respetar unos niveles mínimos de producción propia, que han quedado establecidos en el mandato-marco aprobado ayer. Los porcentajes recogidos en el texto final han sufrido una revisión a la baja respecto a los parámetros propuestos por el PSOE en su primer borrador de texto.Así, el objetivo es que el 60% de la emisión de la oferta generalista de RTVE sea de producción interna, porcentaje que en el caso de la oferta temática se limita al 20%. La propuesta inicial hablaba de un 65% y un 80% respectivamente. El texto mantiene que los programa informativos e institucionales sean 100% de producción interna pero rebaja del 80% al 60% el objetivo previsto para programas de actualidad, infantiles, juveniles, educativos, medioambientales o religiosos, y del 60% al 55% los niveles de producción interna en el caso del resto de formatos.El documento hace una mención específica a Sant Cugat, RTVE en Canarias y al centro territorial de TVE en Valencia como centros de producción que deberán tener un peso concreto en la oferta audiovisual del grupo.En general, este primer mandato-marco establece para RTVE una audiencia objetivo de personas con edades comprendidas entre los 14 y los 45 años y fija los objetivos generales y y las líneas estratégicas del servicio público esencial de RTVE. De este modo, la corporación debe satisfacer las necesidades de información, cultura, educación y entretenimiento de la sociedad española, reflejando su identidad y diversidad cultural y lingüística, defendiendo los valores constitucionales y contribuyendo a la cohesión territorial desde la independencia, el pluralismo, la neutralidad, la imparcialidad y el rigor.

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