Merck zanja el 'caso Vioxx' con un acuerdo de 3.400 millones para las víctimas
Acosada por el caso Vioxx, Merck dijo que no pactaría y vería en los tribunales a sus demandantes. Tres años después de la retirada del analgésico, la farmacéutica anunció ayer un acuerdo de 4.850 millones de dólares (unos 3.398 millones de euros) para dar carpetazo a las demandas.
El abultado acuerdo extrajudicial fue acogido con optimismo por todas las partes y con mucha sorpresa no solo porque la farmacéutica se negó desde el principio a esta fórmula para zanjar el problema legal sino porque además su audaz apuesta por acudir a los tribunales se estaba resolviendo en la mayoría de los casos a su favor. Hasta ayer, Merck había perdido cinco litigios y ganado 11 contra los afectados (y sus familias) por un analgésico que elevaba el riesgo de infarto en los pacientes y fue retirado del mercado en septiembre de 2004.
Documentos internos de la propia farmacéutica revelaron entonces los riesgos de este medicamento que aún sigue siendo investigado por el departamento de Justicia. El acuerdo, no frena las acciones civiles y penales en marcha por varios estados y el propio departamento de Justicia.
El acuerdo, presentado en la mañana del jueves es el mayor alcanzado en lo que va de año en EE UU y uno de los mayores de los últimos tiempos. La cantidad total excede los beneficios del año pasado de la farmacéutica que hará unas provisiones antes de impuestos por la cantidad total en el actual cuarto trimestre.
Con este capital, la tercera farmacéutica estadounidense da carpetazo a más de 26.500 demandas y cierra, en muy buena medida, el grifo de unos gastos legales que hasta ahora se calcula que hayan llegado hasta los 1.900 millones de dólares (unos 1.331 millones de euros al cambio actual). Por mucho que la empresa haya ganado juicios en los que se han sentado precedentes importantes que afectan a otras demandas similares, mientras siguiera abierta la vía judicial, seguiría abierto el capítulo de costes que se calcula que rondaran los 600 millones de dólares cada año.
El consejero delegado de Merck, Richard Clark, aseguraba que este es un 'acuerdo bueno y responsable que permitirá a la compañía concentrarse más en su misión de investigar, desarrollar y llevar al mercado nuevas medicinas y vacunas'. Como es costumbre en este tipo de acuerdos, la farmacéutica no admite culpa ante ninguno de los demandantes que acepten el acuerdo.
Cantidades variables
Para estos, las cantidades variarán según los casos, que serán examinados, porque desde Merck se explica que no se trata de un acuerdo conjunto. El acuerdo saldrá adelante si el 85% de los demandantes así lo desea y se empezará a a hacer efectivo el 1 de mazo de 2008. De momento no hay una cifra cerrada de ciudadanos que se puedan acoger al trato con la farmacéutica que ha fijado varias condiciones para abonar el cheque. Entre ellas que haya prueba de un efecto del Vioxx (un infarto), una prueba que de que la persona haya ingerido más de 30 pastillas de este medicamento y que al menos algunas de ellas se tomara 14 días antes del infarto.
Las acciones de Merck se vieron premiadas ayer por los inversores en una Bolsa en la que abundaban los números rojos. A media jornada subían un 4,6%, aunque terminó la sesión con alza del 2,4%.
Una apuesta judicial arriesgada
El analgésico Vioxx fue lanzado en 1999 y se convirtió en fármaco estrella de Merck con ventas anuales de 2.500 millones de dólares. En 2004 salieron a la luz los posibles efectos secundarios cardiovasculares y Merck lo retiró en septiembre. Sus documentos internos muestran que había dudas sobre él desde 2000.Merck optó por una estrategia arriesgada porque optó por acudir ante los tribunales y no pactar. Los analistas calcularon entonces que debía provisionar unos 10.000 millones de dólares para gastos de litigios e indemnizaciones. El primer juicio lo perdió y la condena incluía un pago a la viuda de una víctima de 253,5 millones que fueron rebajados a 26. Merck continuó en los tribunales y ganó la mayor parte de los casos importantes. Ahora los analistas dicen que hizo bien.