El precio del petróleo sigue marcando récord con un dólar débil
Las dudas sobre la falta de petróleo para cubrir la demanda mundial y la caída del dólar, que tocó mínimos históricos en su cambio frente al euro, llevaron ayer al barril de Brent a otro récord de 95 dólares en Europa, aunque finalmente bajó hasta 93,24 dólares.
Los analistas ya no se atreven a hacer pronósticos sobre la evolución del precio del petróleo a corto plazo. Razones no les falta. El precio se ha desbocado en las dos últimas semanas y ha crecido más de diez dólares por barril hasta alcanzar máximos históricos, al superar ayer los 95 dólares el barril de Brent (de referencia en Europa) y los 98 el West Texas (de referencia en EE UU).
Sólo en la sesión de ayer, el precio del barril subió más de dos dólares en las primeras horas de cotización como consecuencia de la fuerte caída de inventarios de gasolina y petróleo en Estados Unidos, la depreciación del dólar en su cambio frente al euro y los malos augurios de la Agencia Internacional de la Energía. Este organismo, en su informe anual, apuntaba que puede haber problemas en la oferta de crudo a partir de 2015, si persiste la fuerte demanda.
Finalmente, el precio se cayó y se situó en 93,24 dólares en Europa. No obstante, los analistas dan por descontado que el precio seguirá subiendo y que llegará en breve a los 100 dólares, ya que en seis de las últimas nueve sesiones, el precio del crudo ha tocado máximos históricos.
A primera hora de la mañana, el departamento de Energía de EE UU informó que las reservas de petróleo bajaron la semana pasada en 800.000 barriles. A pesar de que este descenso fue inferior a lo que esperaban los expertos, que habían vaticinado un retroceso de hasta 1,6 millones de barriles, el precio siguió creciendo por las expectativas de mayor consumo en EE UU. El invierno está siendo especialmente frío en ese país, el primer consumidor del mundo de calefacción, lo que está acabando con más rapidez de lo previsto con las reservas de crudo.
A la menor oferta en EE UU se unió ayer la fuerte depreciación del dólar frente al euro (en mínimos históricos al cambiarse un euro por 1,47 dólares), lo que ha motivado un fuerte traslado de la inversión desde otros sectores hacia el petróleo en busca de mejores y más rápidas rentabilidades. Desde el inicio de la crisis de las hipotecas de alto riesgo en EE UU, el precio del barril ha subido casi 30 dólares y ha arrastrado a algunas materias primas como el oro, que está en el precio máximo de 28 años.
Por si faltaban pocas tensiones, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) hizo ayer público su informe mundial sobre el mercado del petróleo en 2007, en el que asegura que puede haber problemas de suministro hacia el año 2015 si persiste la fuerte demanda de petróleo, especialmente de países emergentes como China e India.
La AIE calcula que, aunque está previsto que se produzca un aumento de la producción con los nuevos proyectos en los próximos cinco años, 'existe mucha incertidumbre sobre si esto será suficiente para compensar el descenso de producción en los yacimientos existentes', asegura el informe.
Sólo los países de la OPEP deberán pasar de producir 36 millones de barriles diarios hasta los 46 millones en 2015 y hasta los 61 en 2030 para cubrir esas necesidades.
"Demasiado altos"
¦bull;Dana Perino, portavoz de la Casa Blanca, señaló ayer que los actuales precios del petróleo son 'demasiado altos' pero agregó que no considera que la marca de los 100 dólares 'sea un número mágico para que el Ejecutivo tenga que tomar decisiones al respecto', dijo.
La demanda mundial crecerá un 55% hasta 2030
El fuerte crecimiento económico de China e India, cuyo producto interior bruto está creciendo a tasas anuales superiores al 10%, está viéndose acompañado por una subida sin parangón del consumo energético en ambos países. Así lo deja entrever el informe de la Agencia Internacional de la Energía, en el que se asegura que las necesidades mundiales de energía crecerán un 55% entre 2005 y 2030, lo que representa un incremento anual del 1,8%. De esa subida, el 45% le corresponderá a China e India. El informe apunta que la demanda de energía en China se duplicará en esos 25 años, al pasar de 1.742 millones de toneladas equivalentes de petróleo a 3.819 en 2030, con un ritmo de crecimiento anual del 3,2%. Si se cumplen las previsiones de la AIE, China podría desbancar a EE UU como el primer consumidor del mundo en 2010, cuando cinco años antes, el consumo estadounidense superaba al chino en un 33%.El protagonismo de China e India dentro de la demanda energética mundial traerá consigo, según el informe, un repunte en el consumo de combustibles fósiles (gas natural, petróleo y carbón), especialmente de este último, la principal fuente de energía de las industrias chinas. De esta manera, los combustibles fósiles representarán el 84% del consumo, aunque no todos evolucionaran de la misma forma, según la AIE. El mayor crecimiento le corresponderá al carbón, cuyo consumo se incrementará un 73% entre 2005 y 2030, lo que le llevará a representar el 28% del total. Las subidas serán más modestas para la energía convencional y el gas natural, que supondrán el 22% del consumo total respectivamente.