Apuesta por una nueva fórmula para el cálculo de las pensiones

El Gobierno que gane las elecciones generales deberá enfrentarse a otra reforma del sistema de pensiones y a mejoras de los organismos reguladores de los sectores de la energía, las telecomunicaciones o el mercado de valores, según advirtió ayer el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña.

El Ejecutivo que salga de las próximas elecciones de marzo de 2008 tendrá que abordar una nueva reforma del sistema de pensiones, 'que mejore la actual relación entre lo que se aporta a la Seguridad Social y la pensión que se recibe', dijo Carlos Ocaña. Esto supondrá, afrontar una reforma de la fórmula con el que se calcula la cuantía de las pensiones, algo que ha sido el caballo de batalla de las dos últimas reformas y que siempre se ha pospuesto por falta de acuerdo entre los interlocutores sociales.

En concreto, la 'mejora de la contributividad' del sistema de pensiones, por la que apostó ayer Ocaña, implicaría abordar, entre otros asuntos, el número de años mínimo exigido para cobrar una pensión contributiva (15 años en la actualidad), el número de años cotizados que se tienen en cuenta para calcular la cuantía de dicha pensión (ahora los últimos quince años); y el porcentaje de pensión que corresponde al trabajador en función del tiempo cotizado.

Según su opinión, la necesidad de acometer esta reforma de mayor calado en el sistema de pensiones 'es algo que está aceptado por todos: Gobierno, patronal y sindicatos y partidos políticos'. Si bien, dada la importante repercusión socialde estos cambios, Ocaña admitió que 'lo fundamental es encontrar el momento de hacerlo para lograr el consenso necesario de todos'.

De no llevarse a cabo esta reforma, auguró 'problemas importantes', por el envejecimiento de la población, que aumentará notablemente el gasto en pensiones.

ârganos reguladores

La Seguridad Social no es el único organismo que deberá encarar un cambio en la próxima legislatura, según Ocaña, quien apuntó también la necesdidad de mejorar la regulación de los mercados. En concreto se refirió a organismos reguladores como la Comisión Nacional de la Energía (CNE), la Comisión Nacional del Mercado de las Telecomunicaciones (CNMT) o la Comisión Nacional de Valores (CNMV), cuyas reformas también deberán discutirse en los próximos años.

Asimismo, entre los retos para el futuro Gobierno, mencionó el desarrollo de la directiva comunitaria de servicios del mercado interior (Directiva Bolkestein). A su juicio, dicho desarrollo será muy complicado y 'pondrá patas arriba la regulación de las empresas que operan en el mercado de los servicios'. La puesta en marcha de esta normativa exigirá, reducir notablemente las trabas administrativas en la creación y funcionamiento de dichas empresas y el reforzamiento de la protección legal de los consumidores.

Financiación autonómica

Un nuevo sistema 'consensuado' en 2008En su afán de poner deberes al Ejecutivo que gane las próximas elecciones, el secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, aseguró que 'una de las primeras tareas que deberá abordar el próximo Gobiernos será la aprobación de un nueva sistema de financiación autonómica'. Para ello, aseguró que 'ya existe cierto consenso' entre el Gobierno y las comunidades autónomas del que partir para las futuras negociaciones.En este sentido, explicó que hay acuerdo en que 'las variaciones de población se reflejen mejor' en el reparto de la financiación de las regiones.Asimismo, consideró que también hay bastante consenso en cuanto a la necesidad de 'mantener todos los criterios de solidaridad del sistema', y mejorar la transparencia de dichos mecanismos.Otro aspecto en el que Gobierno y comunidades coinciden es el referido a realizar reformas periódicas del sistema; así como la conveniencia de incrementar la cesión de impuestos a las regiones, o de utilizar 'de forma más intensa' el Fondo de Compensación Territorial'.En opinión del secretario de Estado, esta reforma 'será difícil y requerirá un esfuerzo grande de negociación', además de 'las voluntades de todos'. Si bien insistió en que existe un 'consenso básico respecto a los principios que deben inspirarlo', por lo que se podrá hacer a lo largo de 2008 para que esté en vigor en 2009, añadió.

Mejora competitiva

'Las empresas tienen que acortar el 'gap' en I+D+i''El Gobierno socialista ha priorizado la batalla por la productividad' en los últimos tres años, aseguró ayer Carlos Ocaña. En consecuencia, precisó que cuando el PSOE ganó las elecciones el crecimiento de la productividad era 'cercano a cero y ahora ronda el 1% anual'.No obstante y tras hacer hincapié en esta idea, admitió que pese a ello, España 'va detrás' de la Unión Europea en materia de inversión, por este orden, en tecnología, capital humano e infraestructuras. A su juicio, el mayor déficit 'con diferencia' se da en la inversión en I+D+i, sobre todo por parte de las empresas, de las que dijo 'son las que tienen que acortar ese gap tecnológico'.Según el argumento del secretario de Estado, el sector público ya invierte cerca del 0,7% del Producto Interior Bruto (PIB) en I+D+i, mientras que las empresas sólo destinan en su conjunto entre cuatro y cinco décimas del crecimiento de la economía. Un largo camino, pues, del que queda mucho trecho por recorrer.