Cambiar el contador de la luz le costará a las eléctricas cerca de 3.000 millones de euros
Un 9% del total de los contadores tiene entre 25 y 30 años de antigüedad y un 5,8%, más de 30 años. Con más de 5 años se sitúa el 28%.
Sustituir el contador de la luz de toda la vida por uno digital va a costarle al sector eléctrico entre 2.500 y 3.000 millones de euros. Fuentes del sector estiman que la adecuación de infraestructuras para acoger los nuevos sistemas digitales, cuya responsabilidad podría recaer directamente sobre los propios usuarios, rondará los 1.500 millones de euros.
La magnitud de estas cifras ha convertido el plan de sustitución de contadores en una de las principales controversias dentro de la actividad de distribución. En el sector existen reticencias no sólo relacionadas con el coste del plan, sino con la dificultad de que el ahorro energético preconizado por el Gobierno, de hasta el 8% de la factura de la luz, pueda alcanzarse finalmente.
En su reciente informe sobre el plan de sustitución de contadores, la Comisión Nacional de la Energía (CNE) propone un proceso de diez años de transición sin coste para el usuario, en el que las administraciones públicas se encarguen del reemplazo.
No obstante, el Ministerio de Industria, que tendrá la última palabra tras estudiar el informe que el propio gabinete encargó al regulador energético, aboga por que sean las empresas las que asuman el coste.
Para facilitar a las eléctricas el proceso de transición, Industria elevó hasta 0,78 euros al mes el coste del alquiler de los nuevos contadores que los usuarios deberán asumir en la factura de la luz, con vistas a su amortización en quince años.
La CNE estima que deberán sustituirse 27,2 millones de aparatos, lo que equivale al 55% del parque total, compuesto por 49,2 millones de unidades.