Acerinox gana un 56% más pese a la menor demanda

Acerinox cerró los primeros nueve meses del año con un beneficio neto de 424,3 millones de euros, un 56,4% más que en el mismo periodo de 2006.

El grupo fue capaz de superar las incertidumbres generadas en el mercado de aceros inoxidables en el tercer trimestre por el brusco descenso de los precios del níquel. Esta situación provocó una retracción significativa de la demanda, ya que los almacenistas optaron por poner en circulación las existencias y aplazar pedidos para aprovechar un descenso mayor de los precios por los extras de aleación.

Pese a estas tensiones, Acerinox logró un beneficio bruto de operativo (Ebitda) de 821,56 millones, un 58,1% superior al de 2006, con unas ventas que crecieron un 39%, hasta los 5.458,1 millones.

En todo caso, y ante la situación del mercado, el grupo ha efectuado una provisión de 115 millones por ajuste de existencias a valor neto de realización, 'por criterios de prudencia'.

Como viene siendo habitual, la mayor aportación a los resultados fue la realizada por la filial estadounidense NAS, que contribuyó al 44% del beneficio. Le siguieron la matriz Acerinox, con una aportación del 32,2%, la sudafricana Columbus, con un 9,9%, y las filiales españolas Roldán e Inoxfil, con un 4,9%.

A 30 de septiembre, la deuda neta del grupo era de 1.359,1 millones, 105 millones más que al cierre de 2006. El apalancamiento pasó del 55% al 52,8%.

En cuanto a la producción, Acerinox optó por ajustar la oferta a las menores necesidades del mercado, lo que ha supuesto un recorte del 11,3% en la producción de acería y del 7,4% en la de laminación en frío.