Abertis intentará nuevas compras en Italia si descarta la fusión con Atlantia
Italia es un foco de máxima atracción para Abertis. Su consejero delegado, Salvador Alemany, dijo ayer que mantiene el interés por la concesionaria de autopistas Atlantia, pero la fusión depende del nuevo marco regulatorio en materia de tarifas: 'Sabremos cómo afecta en el valor de la empresa en diciembre'. De quedar descartada esta operación, 'se buscarán otras opciones de crecimiento en Italia'.
Abertis no se mueve ni un centímetro de su postura de los últimos meses respecto a la pretendida fusión con el grupo italiano Atlantia (antigua Autostrade), abortada en diciembre de 2006. Su consejero delegado, Salvador Alemany, reiteró ayer en un desayuno organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), que antes de volver a negociar es preciso conocer con detalle cómo queda la nueva regulación en materia de concesiones: 'Sólo entonces sabremos el verdadero valor de Atlantia'.
Pese a esta postura, introdujo un matiz en forma de interés por el mercado italiano, incluso si quedara frustrada la ofensiva por Atlantia: 'Italia está en nuestro plan de expansión y, aparte de nuestros negocios en aparcamientos, queremos aumentar la presencia en telecomunicaciones, logística, autopistas y aeropuertos'.
Alemany lanzó una andanada contra los 'proteccionismos y nacionalismos económicos' de los Gobiernos que se inmiscuyen en operaciones corporativas. En este sentido, culpó al Ejecutivo italiano de imposibilitar la creación del mayor operador mundial de infraestructuras.
Reservar recursos para Atlantia frenó una posible opa sobre Eutelsat
Ahora, queda esperar que las dudas que pesan sobre la revisión de las tarifas de las autopistas italianas se despejen antes del cambio de año. 'En diciembre quedarán trámites como el paso por el Tribunal de Cuentas y el debate parlamentario, pero la normativa habrá sido tenida en cuenta en la Ley de Acompañamiento de los presupuestos y esto dará una idea de cómo puede quedar definitivamente', cree el ejecutivo.
En todo caso, Alemany confirma que no 'ha tirado la toalla' en el caso Atlantia, pese a que las condiciones que cristalizaron en el acuerdo de fusión de septiembre de 2006, con la bendición de Bruselas, han variado y habría que buscar una nueva fórmula de canje. 'Podríamos hablar de la operación bien entrado 2008', avanzó, para matizar a renglón seguido que 'será difícil volver a poner a todos de acuerdo. Había un trabajo hecho y quedó abortado por la introducción de cambios que se podrían haber negociado', lamenta.
El crecimiento de Abertis, según la versión oficial, no ha notado el esfuerzo por Atlantia. Pero Alemany reconoce que reservar recursos para esa operación pudo frenar una opa sobre Eutelsat, operador de satélites francés en el que Abertis controla el 32%.
La fusión con la italiana comenzó a diseñarse en 2004 en busca de un gigante, valorado en 25.000 millones y con 7.000 kilómetros de autopistas en concesión, que compitiera en EE UU, Europa del Este y Asia. 'Habríamos sido invencibles', aseguró el ejecutivo.
A por Hispasat antes de 2008
Dice que no presiona, pero Alemany invita al Gobierno a que resuelva la entrada de Abertis en Hispasat antes de que concluya 2007. La intención de la empresa es hacerse con una participación de control, pese a lo que los socios que representan a la Administración podrían elegir al presidente y marcar el rumbo de áreas sensibles como las comunicaciones militares o las civiles con Latinoamérica.Abertis descarta fusionar el operador español de satélites con la francesa Eutelsat, donde tiene el 27,69% del capital. Pero admite que buscaría sinergias en el plano comercial entre ambas partes.'El tren está sobre la vía y esperamos alcanzar un acuerdo', valoró el ejecutivo. Ante la proximidad de las Elecciones, Alemany aseguró no haber recibido consigna alguna para retrasar esta negociación más allá de los comicios.