Sony vende a Toshiba un 60% de su filial de chip para videojuegos
Rivales en los ordenadores personales y los reproductores de DVD de alta definición, ahora se han hecho socios en el segmento de los chips. Sony ha llegado a un acuerdo preliminar con Toshiba para vender a esta última varias líneas de producción de chips para videojuegos, cuyo destino final es su inclusión en las consolas PlayStation 3.
En principio, y según explicaron en un comunicado conjunto, ambas compañías constituirán una sociedad conjunta de la que Toshiba tendrá un 60% y Sony un 40%. La alianza, de la que no se han detallado los términos financieros, se materializará, si se cumplen todos los plazos, a final del mes de marzo. La intención de la cúpula directiva de Sony es salir de este negocio, del que la empresa no ha sido capaz de obtener rentabilidad en los últimos tiempos. Las dos firmas señalaron que van a trabajar conjuntamente en el desarrollo de nuevas tecnologías para la producción de chips. En este sentido, ambos grupos situaron como uno de sus objetivos la migración de los procesos de fabricación a los chips de 45 nanómetros.
De igual forma, los dos gigantes nipones de la electrónica están negociando un acuerdo por el que Toshiba compraría todo el negocio de semiconductores de Sony. Diversos periódicos japoneses han valorado esta operación en 861 millones de dólares (unos 610 millones de euros). No obstante, los portavoces de Sony dijeron a Bloomberg que el precio final será determinado a final de marzo de 2008.
Con estas desinversiones, Sony estaría captando liquidez para elevar las inversiones en producir más equipos de electrónica de consumo: ordenadores personales, televisiones y cámaras digitales. En definitiva, concentrarse en su negocio principal.
El poder de Toshiba
En la nueva sociedad, que tendrá su sede en la ciudad de Nagasaki, el presidente y el consejero delegado serán elegidos por Toshiba, mientras que el responsable de operaciones será nombrado por Sony. En lo que todavía no se han puesto de acuerdo ambos socios es en la elección de un nombre para la compañía.