Vincci centra su inversión hotelera en la Península tras su incursión en EE UU

La cadena hotelera Vincci, de la familia Calero (fundadores de Tryp), hará un paréntesis en 2008 para el crecimiento en EE UU, previsto en su plan de aperturas. De esta forma, volverá a concentrar la inversión (cerca de 80 millones de euros) en ocho enclaves de España y Portugal.

Vincci prevé incorporar el año que viene ocho establecimientos a su cartera, para lo que requerirá una inversión de cerca de 80 millones de euros. Todos los nuevos activos estarán situados en España y Portugal: en Chiclana (Cádiz), Málaga (Vincci Posada del Patio), Cádiz (Vincci Alcaidesa), Lisboa (Vincci Lisboa), Avilés (Asturias), Marbella (Málaga) y en Campanillas (Málaga).

Por este motivo, su desarrollo en EE UU toma un respiro durante el ejercicio que viene para concentrarse en su negocio más histórico: las ciudades españolas, las Islas, Túnez y Portugal.

En los últimos años, la cadena española ha probado con el mercado estadounidense donde ha abierto tres establecimientos: el Vincci Avalon en Manhattan (Nueva York), el Vincci Garden Court en el corazón de Silicon Valley (California) y un tercero en Miami.

Precisamente, estos hoteles dieron a la cadena un gran empuje en sus resultados de 2006. La cadena, que cuenta con 32 hoteles, facturó 96 millones de euros, un 26% más que el año anterior. El avance del Ebitda, que disparó la cifra hasta un 1,4 millones de euros frente a los números rojos del año anterior, se debió a un mayor número de activos.

En enero, Vincci anunció sus pretensiones de seguir creciendo en Estados Unidos. Incluso propuso a medio plazo abrir hoteles en Washington, Boston y Los Ángeles.

Los responsables de la empresa calificaron al mercado estadounidense como de gran potencial por su alta ocupación. Sin embargo, la situación ha cambiado en aquel país por la crisis inmobiliaria y el mercado ha sufrido una ralentización de las operaciones. Tanto es así que muchos grupos turísticos internacionales esperan con cautela cómo evoluciona para continuar con su desarrollo de activos.

Otro grupo español, el mallorquín Barceló, también espera entrar en EE UU de la mano de un fondo de inversión que le aporte apoyo financiero para incorporar hoteles.

Sin embargo, la dificultad del mercado está paralizando este proceso de búsqueda de socio.

De momento, Barceló seguirá creciendo en EE UU a través de su filial local Crestline, con la que gestiona actualmente 45 establecimientos.

NH Hoteles también está presente allí tras adquirir el pasado año la cadena Jolly (que cuenta con un hotel en Nueva York, el Madison Tower Hotel).

Previsiones

Además de EE UU, ciudades como París, Londres o Bruselas son de interés para Vincci a medio plazo, además del mercado italiano, que es uno de los preferidos por la familia Calero. Sin embargo, su alto nivel de segmentación y el fuerte arraigo de las empresas locales, 'hace que sea un destino muy difícil para los grupos extranjeros'.

La previsión de facturación de Vincci Hoteles para este año contempla unas ventas de 95, 2 millones de euros, un 54,3% más que en 2006.

Hoy la empresa cuenta con establecimientos en España (20), Túnez (siete), y EE UU (tres). La cadena no prevé sobrepasar los 50 hoteles, un límite que permite controlar el negocio.

El último informe elaborado por el equipo directivo de Vincci, que se reunió el pasado 8 de octubre, concluye que el año pasado la cadena abrió 500 nuevas habitaciones.

La estrategia de la cadena sigue centrada en abrir hoteles urbanos muy céntricos, con categoría de cuatro estrellas y establecimientos vacacionales de cinco estrellas.

La cadena dispone de liquidez para ir de compras

A principios de año, la familia Calero -dueña del 80% de Vincci- puso a la venta su participación del 6,5% que tenía en Sol Meliá. Con ello, logró una liquidez de 182,9 millones de euros. Vincci prevé seguir extendiendo su negocio por Europa y América y hacerse con más activos hoteleros.De hecho, en el mercado se comenta que están más que preparados para afrontar nuevas adquisiciones de redes de activos, e incluso que podría estar negociando con Acciona para comprarle sus hoteles. Con esta compañía, mantiene un acuerdo comercial desde el año 2002, por el que comparten la sociedad en común Altai Hoteles al 50%. Vincci gestiona los hoteles y Acciona los promociona.El grupo de la familia Calero apuesta por la propiedad, en contra de la tendencia del resto del sector que se inclina más por la gestión, el alquiler o el arrendamiento y por la desinversión de los activos que poseen.Los Calero fundaron la cadena Vincci hace seis años, pero su andadura en el mercado hotelero comenzó con la creación de la red de hoteles de ciudad Tryp. æpermil;sta pasó en el año 2000 a formar parte de Sol Meliá. En la operación, los fundadores de Vincci recibieron dinero en metálico y una participación de la compañía de la que este año se ha deshecho para acometer nuevas compras. Los fundadores de Tryp y socios de Ailemlos (Rufino Calero, Max Mazin y Antonio Rufino) se embolsaron 360 millones con esta venta. La cartera hotelera en Vincci está formada por 34 establecimientos, aunque prevén varias aperturas más este año.La mayor parte de ellos se encuentran en España, aunque también están presentes en la zona Mediterránea y Estados Unidos.