El FMI avisa que lo peor de la crisis financiera puede no haber pasado
El líder del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato, afirmó ayer que la incidencia de la crisis financiera iniciada en Estados Unidos sobre la economía todavía está por determinar. Rato aclaró que, 'con la información actual', el impacto será moderado sobre el PIB de 2008, aunque podría ser más grave de prolongarse la inestabilidad.
El temporal no ha pasado. El aún máximo dirigente del FMI dejó ayer claro que, para evaluar los daños de las turbulencias financieras sobre la economía real mundial, habrá que esperar hasta que aquellas se disuelvan. Síntoma claro de que, de momento, los peligros permanecen. Rato que visitó ayer Madrid para inaugurar el Foro España-Iberoamérica, organizado por la Cámara de Comercio de Madrid, afirmó que la convulsión de los mercados financieros de crédito, originada por la crisis de las hipotecas subprime (alto riesgo) en Estados Unidos, supone un cambio relevante para la economía internacional.
El Fondo publicará en diez días sus nuevas perspectivas de crecimiento, que incluirán un retoque a la baja respecto a las de antes del verano. Rato afirmó que, 'con la información disponible en la actualidad', los efectos sobre la economía real se dejarán notar el año que viene, cuando se registrará 'una moderación del crecimiento mundial'. Siempre que la crisis no se alargue, esa moderación dejaría el crecimiento del PIB por debajo de los del año pasado y el actual, pero 'todavía por encima de la media'.
En cualquier caso, la convulsión aún no ha terminado, y 'pasarán meses hasta que se puedan evaluar las pérdidas para bancos e inversores'. Rato aplaudió las inyecciones de liquidez realizadas por el Banco Central Europeo y sus homólogos de Estados Unidos y Reino Unido, entre otros, y también que hayan sesgado a la baja sus decisiones sobre tipos de interés (el BCE los ha mantenido en el 4%, 'pese a su intención inicial', en palabras del propio Rato). También se refirió a la cotización del dólar en los mercados de divisas: 'En términos de comercio ponderado, el dólar está por debajo de la paridad. Pero eso no significa que sea el caso frente a cada divisa en particular', afirmó, al tiempo que abogó por dejar funcionar al mercado.
Solbes mantiene el Presupuesto
En la parte central de su discurso, Rato elogió las reformas desarrolladas en América Latina, 'cuyos frutos se están recogiendo ahora'. Así, explicó que la crisis financiera podría detraer medio punto de crecimiento a algunos países, pero, en todo caso, el impacto será mucho menor que en episodios críticos anteriores. Mientras, el vicepresidente Pedro Solbes, se refirió ayer a las turbulencias financieras a su llegada a la reunión del Eurogrupo. El titular de Economía explicó que España no va a modificar las perspectivas en las que se basan los Presupuestos, y afirmó que 'el esfuerzo de un ajuste en EE UU no debe recaer exclusivamente sobre Europa', en referencia a la fortaleza del euro.
Presencia institucional y del empresariado
La comparecencia de Rodrigo Rato creó ayer una gran expectación en el recinto ferial de Ifema. En la mesa inaugural se sentaron, entre otros, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, el presidente de la patronal CEOE, Gerardo Díaz Ferrán; su homólogo de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM), Arturo Fernández Álvarez, y el presidente de la Cámara de Madrid, Salvador Santos Campano.Rato, cuyo regreso a España ha creado gran expectación en los círculos políticos -aunque él mismo ha aclarado que se dedicará a asuntos personales- apareció acompañado por el ex alcalde de Madrid José María Álvarez del Manzano. Fue en el momento del Esperanza Aguirre, quien reparó en la llegada de Rato por 'el tumulto de fotógrafos que se ha creado en la sala'.Aguirre alabó el mercado y el liberalismo como fuente de riqueza y desarrollo, y cargó contra el 'populismo', un sistema que 'como ha demostrado la historia una y otra vez, lleva a la pobreza y a la aniquilación de las libertades'. En el foro participaron cerca de mil empresarios y responsables de patronales y tribunales de arbitraje de veinte países.