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Crecimiento

La industria no relevará a corto plazo a la construcción, según los expertos

El Gobierno está convencido de que la industria relevará a la construcción como motor de crecimiento económico. Los expertos de Funcas creen que ese cambio no se producirá, al menos a corto plazo.

El Ejecutivo y los expertos no coincidieron ayer a la hora de analizar el actual papel del sector industrial como sustituto de la construcción.

Mientras que el secretario general de Industria, Joan Trullen, se mostró convencido de que la industria tomará el relevo de la construcción como motor económico 'por ser un activador del crecimiento de la productividad de la economía en España', los analistas de Funcas, que presentaron ayer un estudio monográfico sobre el sector, discreparon al señalar que la industria no se convertirá en el motor de la economía española, porque, según indicaron, 'las políticas industriales deben tener un impacto lento y a muy largo plazo'.

Trullén defendió su tesis al asegurar que durante los últimos ocho trimestres, el crecimiento de la actividad industrial española ha sido 'realmente extraordinario' y ha permitido que el conjunto de la productividad agregada del conjunto de la economía creciera a un ritmo 'significativo'.

En concreto aseguró que en el primer y segundo trimestre de 2007, la productividad industrial creció por encima del 5%, por lo que, a su juicio, se puede decir que la industria está protagonizando una nueva etapa de crecimiento económico sobre unas bases que consideró 'muy sólidas'.

El secretario general de Industria insistió en que con políticas específicas y activas, como las que incentiven las actividades de I+D+i, se conseguirá una transición industrial que permitirá a España situarse en una posición 'equiparable' con otras economías europeas muy avanzadas.

La réplica se la dio el profesor de Economía Aplicada y coordinador de la publicación, Francisco Javier Velázquez, quién apuntó algunas de las deficiencias del sector industria. En su opinión, el tejido industrial español se caracteriza por la fuerte presencia de microempresas, la falta de competitividad de las mismas y la merma de recursos y capital que ha provocado el fenómeno de la deslocalización.

Un sector monopolizado por las pequeñas y medianas empresas

Funcas señala que uno de los grandes problemas del sector industrial es la fuerte presencia de pequeñas empresas, que por su tamaño y su falta de cooperación, no hacen el esfuerzo suficiente para potenciar las políticas de I+D+i.Por ejemplo, el gasto en innovación empresarial en España tan sólo supone el 69% de la media de la UE-25 y tan solo el 6% de las pymes coopera tecnológicamente con otras empresas frente al 39% de las multinacionales.

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