El pulso de Heathrow

Ferrovial hizo ayer una advertencia a las autoridades aeroportuarias británicas acerca de las dificultades de acometer las inversiones que precisan los aeropuertos que compró en 2006 (BAA), si se aplica el régimen de tarifas que para el periodo 2008-2013 ha propuesto la Comisión de Competencia. La comisión propone unas tarifas que suponen un retorno para el capital del 6,2%, el más bajo de los últimos 20 años, frente al 7,75% vigente.

La multinacional española adquirió unos aeropuertos que proporcionaban un pésimo servicio, pese a estar entre los de mayor tráfico de Europa. Ponerlos en estado de revista para acontecimientos como las Olimpiadas de 2012 en Londres supone ingentes inversiones, sólo posibles con una rentabilidad más generosa. La calidad de Heathrow es mala, pero es apreciablemente mejor que hace un año, y mejorará cuando esté a pleno rendimiento su nueva terminal. Ferrovial ha apostado fuerte con su inversión y se juega mucho ante clientes e inversores. Por ello, las autoridades británicas tienen que ser sensibles a las peticiones de la compañía. Londres se juega su prestigio mundial.