Las rebajas moderan los ingresos
El Gobierno se lanza al tramo final de la legislatura con nuevos recortes en los impuestos directos que reducirán la presión fiscal.
Llegan tiempos de ajuste para los ingresos. Después de tocar techo en 2006 y 2007, el ciclo económico español afronta para el año que viene una suave desaceleración de medio punto en su producto interior bruto. Un motivo para esperar una moderación de la recaudación impositiva, que se verá reforzado por la decisión del Ejecutivo de llevar un poco más lejos sus rebajas fiscales del año pasado.
Según las cuentas presentadas ayer en el Congreso de los Diputados, los ingresos no financieros del Estado suavizarán su dinamismo durante el año que viene al crecer un 5,1%, por debajo del PIB nominal previsto del 6,7%. El vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, reiteró ayer que se sigue 'encontrando cómodo' con la previsión del 3,3% de PIB real realizada por el Ejecutivo en julio.
El impuesto sobre la renta crecerá apenas un 5,2%, pues aún se deja notar la reforma de 2006 y comenzará a manifestarse la nueva bajada del próximo año. A ello se añade la previsible desaceleración del empleo, que pasaría de crecer un 2,8% a hacerlo un 2,2%. El Gobierno contempla además menores crecimientos del salario y la pensión media, que se sumarán al impacto recaudatorio de la moderación en el crecimiento de tipos de interés, dividendos y ganancias patrimoniales.
En cuanto al impuesto de sociedades, los ingresos aumentarán un 6,2%, hasta alcanzar los 44.420 millones de euros. Un incremento muy inferior al del ejercicio en curso, debido a los efectos de la reforma del año pasado y a que, según reconoce el Gobierno, se prevé 'una evolución más moderada de los beneficios empresariales, tras años de crecimientos excepcionales'. Los impuestos directos pasarán a representar el 57,2% de los ingresos no financieros del Estado central, lo que supone tres décimas menos que en el año en curso. En cambio, los indirectos ganan peso al pasar del 32,7% en 2007 al 33,6% en los Presupuestos del año próximo. En el capítulo de los impuestos indirectos, que supondrán el 41,8% de los ingresos impositivos en 2008, se alcanzará la cifra de 84.784 millones de euros recaudados, con una ligera aceleración respecto a 2007. Los ingresos por IVA crecerán un 6,3%, debido al menor peso esperado de las devoluciones, que compensarán la previsible desaceleración en todos los epígrafes sujetos a este tributo (consumo privado, adquisición de vivienda y gasto de las administraciones públicas).
Las devoluciones de 2008 corresponderán a las solicitudes del año en curso, cuya proyección a la baja se produce, según el Gobierno, por la reducción de la factura energética. Las mensuales, ligadas a operaciones de exportación de 2008, también se moderarán por el menor crecimiento de las ventas a otros países.
Moderada será también la expansión de los impuestos especiales: los 20.008 millones de euros presupuestados suponen un avance del 3,3%. Una ralentización debida, fundamentalmente a la evolución más modesta de los ingresos relativos al impuesto sobre las labores del tabaco.
Con todo ello, el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado de 2008 contempla que los ingresos no financieros centrales alcanzarán los 158.757 millones de euros, un 8,3% más que en el Presupuesto inicial de 2007, pero sólo un 4,2% por encima de la recaudación esperada para este año. Si se añade la participación de las Administraciones Territoriales en los ingresos impositivos, alcanzarán la cifra total de 217.497 millones de euros, un 5,1% más de lo esperado para el año en curso.
Respecto a los ingresos no impositivos, los presupuestos contemplan una reducción del 1,4% para el año que viene, después de los 'fuertes incrementos registrados en 2007'. El montante se situará en 14.641 millones de euros, con descensos en la mayoría de capítulos excepto los correspondientes a ingresos patrimoniales y a transferencias de capital.
Evolución de los principales tributos
IRPF: Desaceleración y más reforma
En el impuesto sobre la renta de las personas físicas se prevén unos ingresos de 70.579 millones de euros, lo que representa un crecimiento interanual del 5,2%. Ello supone una notable desaceleración frente al 6,8% que crecerá la recaudación del IRPF en 2007. A ello contribuyen, según el Gobierno, el menor crecimiento esperado de las rentas de las familias, los efectos de la reforma fiscal de 2006 que todavía se dejarán notar, y la nueva reducción del impuesto anunciada la semana pasada.
Sociedades: El crecimiento se divide por dos
El mayor recorte en los avances recaudatorios se situará el año que viene en el impuesto que grava los beneficios empresariales. Los 44.420 millones de euros presupuestados suponen un alza del 6,2% sobre el avance de liquidación de 2007, y contrastan vivamente con el 11,1% del año pasado. La segunda etapa de la reforma impositiva (el tipo general quedará en el 30%) se verá acompañada de una 'previsible moderación de los beneficios, tras años de crecimientos excepcionales'.
IVA: Menos devoluciones
El principal impuesto indirecto del sistema español alcanzará una recaudación de 61.279 millones, un 6,3% más que en el avance de liquidación de este año. Un ritmo ligeramente superior al del año pasado, pese a que para 2008 se prevén sendas desaceleraciones en el consumo privado y la adquisición de vivienda. Ello es posible, según el Gobierno, porque durante 2008 deberá realizarse un menor número de devoluciones por el Impuesto sobre el Valor Añadido.
Especiales: Crecimiento limitado
La otra gran pata de los impuestos indirectos crecerá a penas un 3,3%, prácticamente la mitad que el PIB nominal. La recaudación por el Impuesto de Hidrocarburos crece más que en 2007 como consecuencia de la estabilización de las devoluciones a agricultores y transportistas, que redujeron la recaudación de ese año. Respecto a los ingresos por Labores del Tabaco, no se espera que las subidas de precios lleguen a compensar el descenso previsto en el consumo.
Tasas y otros: Caída del 1,2% respecto a 2007
Entre los ingresos no impositivos destaca la evolución a la baja de las tasas: las previsiones apuntan a que durante 2008 se recauden 2.779 millones de euros por este concepto, un 1,2% menos que durante el año en curso. El proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2008 contempla también una reducción de los ingresos por transferencias corrientes. Frente a los 6.450 millones de euros del año vigente, en 2008 se limitarían a 6.013 millones, un 6,8% menos.
Prevención del fraude
El texto presentado ayer por el vicepresidente económico incluye un epígrafe referido a los 'avances en la lucha contra el fraude fiscal'. Según el mismo, el Plan de Prevención elaborado por la Agencia Estatal de Administración Tributaria ha supuesto, durante sus dos años de aplicación, un incremento recaudatorio directo del 30% en las actuaciones de control, con un montante cercano a los 10.000 millones de euros.
Inyección de 2.289 millones a las familias
A lo largo de 2008 entrarán en vigor nuevas medidas normativas en el IRPF que supondrán, según el Gobierno, un ahorro de 2.289 millones de euros adicionales para las familias. Los presupuestos presentados ayer incluyen la deflactación de la tarifa para amortiguar el impacto de la inflación, por valor de 257 millones de euros. Además, por primera vez incluyen una actualización de los mínimos personales y familiares, además de la reducción por trabajo, lo que supondrá otros 682 millones menos para los contribuyentes. Todo ello, al margen de las prestaciones para el fomento de la natalidad (2.500 euros por hijo, para un total previsto de 1.000 millones de euros) y los incentivos al alquiler para jóvenes y contribuyentes de rentas bajas (otros 350 millones durante su primer año de vigencia).En el otro gran impuesto directo, el de Sociedades, el año que viene se producirá la segunda rebaja del tipo general, que pasará del 32,5% al 30%, tal como se preveía en la reforma aprobada en 2006. A estas cifras hay que unir una escasa aceleración en la recaudación del IVA, en un entorno de ralentizaciones del consumo y la construcción, que llevarán globalmente a un incremento de los ingresos impositivos del 5,6%. Si se tiene en cuenta que el PIB nominal crecerá un 6,7%, se deduce que la presión fiscal en la economía española se verá reducida en 2008.