Deutsche Bank y Commerzbank reconocen que la crisis podría afectar a sus resultados

La crisis de los mercados empieza también azota a los bancos alemanes. El presidente del primer banco alemán Deutsche Bank, Josef Ackermann, admitió ayer a la televisión germana ZDF que los resultados del tercer trimestre de la entidad podrían verse perjudicados por culpa de algunos 'errores' cometidos en los momentos de euforia. Ackermann no descartó tener que depreciar algunos de sus activos y hacer nuevas previsiones en su cartera de deuda así como redirigir acuerdos crediticios para grandes adquisiciones por valor de 29.000 millones de euros. También advirtió que no cumplirán con el objetivo de incorporar 4.000 empleos a finales de año. 'Probablemente no lo haremos porque los mercados no nos lo permitirán', señaló el banquero. Coincidiendo con estas declaraciones reconoció que el banco germano ha adquirido un 3,56% del británico en crisis Northern Rock.

Las turbulencias también han afectado al segundo banco alemán, Commerzbank. Su presidente, Klaus Peter Mueller, comunicó que las pérdidas derivadas de la exposición al mercado hipotecario de alto riesgo de EE UU podrían ser mayores que las previstas. Mueller, que había reservado 80 millones de euros para cubrir las pérdidas de 1.200 millones de euros ocasionadas por productos de deuda, no quiso hacer nuevo pronóstico.