Las gafas ya no son un impedimento para los pequeños
El curso empieza un año más y los padres, entre todo lo que tienen en cuenta para que el comienzo del colegio sea lo mejor posible, se preocupan por la vista de sus hijos. Los resultados son claros: uno de cada cuatro niños en edad escolar tiene problemas de visión, según el Departamento de Optometría de la Universidad Europea de Madrid, que también asegura que el 30% de los casos de fracaso escolar se debe a deficiencias visuales.
Sin embargo, cuando se trata de los pequeños de la casa, no siempre son bienvenidas las gafas. æpermil;stas no sólo aportan una corrección de la visión, sino que también son foco, por todos bien sabido, de burlas o trato discriminatorio por parte de los otros niños, que pueden causar complejos a los más pequeños. Además, a esas edades, los niños necesitan moverse, jugar, hacer deporte y liberar energía, algo que no es tan sencillo cuando hay que estar pendiente de que las gafas no se rompan.
Por eso, el grupo CooperVision ha ideado unas lentes de contacto especiales para niños y adolescentes. æpermil;stas son para uso ocasional que facilitan, sobre todo, la realización de ciertas actividades, como las deportivas, puesto que reducen enormemente el riesgo de sufrir algún accidente. Por otra parte, termina con el problema de la discriminación y fomenta una mayor autoestima en los niños con problemas visuales. Pero a esas edades, ¿son lo suficientemente responsables como para usar correctamente las lentillas? Sus inventores han pensado en esto, ya que las lentes son de uso diario. Al final del día se desechan.
Además, más allá de la confianza en uno mismo o la estética, los expertos aseguran que el uso de lentillas facilita el desarrollo de otras actividades como el estudio, la lectura o el uso del ordenador. 'La fusión con el ojo que se alcanza con las lentes de contacto es mucho mayor que con las gafas, lo cual puede ser de gran relevancia en el rendimiento escolar óptimo', explica el doctor Orduna, cirujano oftalmólogo.
Algunos padres, cuyos niños ya usan estas lentillas aseguran que sus hijos hacen más cosas ahora 'porque antes no veían bien'.