Francia crea otro gigante energético con la fusión de Suez y Gaz de France
La eléctrica francesa Suez y el gigante estatal del gas Gaz de France (GDF), con una facturación conjunta de 71.900 millones, están cada vez más cerca de fusionarse en la que sería la cuarta compañía europea de la energía por capitalización bursátil (90.400 millones). Ambas zanjaron ayer los términos financieros del acuerdo y harán públicos los detalles antes de la apertura de la sesión bursátil de hoy en París.
Los contactos del fin de semana han desembocado en un plan para realizar una fusión igualitaria, tal como fue previsto durante la mediación del anterior Gobierno conservador en 2006.
Desde entonces, la capitalización de mercado de Suez (54.123 millones), accionista de la española Gas Natural (10,07%), se ha incrementado más rápido que la de GDF (36.206 millones), por lo que el grupo privado se desprendería parcialmente de sus actividades relacionadas con el medio ambiente, tasadas en más de 17.000 millones.
Posteriormente, Suez debe crear una filial de servicios medioambientales y sacarla a Bolsa bajo la denominación de Suez Environnement.
'Es un acuerdo muy equilibrado', afirmó una fuente cercana a la negociación, 'estamos siguiendo lo que hemos planeado, la misma paridad y la misma organización. Es una fusión entre iguales'.
Lo que ha posibilitado el entendimiento, según la ministra de Economía gala, Christine Lagarde, es 'la coherencia del proyecto', para que todas las actividades de energía estén en el mismo polo y quede fuera 'el de medio ambiente, que figuraba en el anterior plan de fusión'.
La llegada a buen puerto coincide con los movimientos del presidente francés, Nicolás Sarkozy, por acelerar el proceso de fusión. La semana pasada el mandatario galo inyectó presión a las negociaciones pese a que los sindicatos rechazan con firmeza la integración por el riesgo que podría suponer para el empleo.
A la espera del comunicado oficial, las quinielas apuntan a que el presidente de Suez, Gérard Mestrallet, renovará el cargo en el nuevo conglomerado. El número dos, por su parte, será el actual primer ejecutivo de GDF, Jean-François Cirelli.
El Estado, primer accionista
Una de las incógnitas en la macro fusión era conocer qué participación retendrá el Estado en el capital del nuevo gigante energético. Algo sobre lo que la ministra de Economía, Christine Lagarde, arrojó luz ayer en un programa de televisión. Lagarde aseguró que, tras la operación, el Estado tendrá una 'minoría de bloqueo' por encima del 33,3% del capital.Otro colaborador de Sarkozy, el secretario de la Presidencia, Claude Guéant, remarcó que el movimiento de Suez y GDF significa la 'privatización' de la segunda, en la que el Estado cuenta con el 80% del capital. 'Pero hay que decir que es una privatización en la que el Estado es el primer accionista, y de lejos', matizó Guéant.