Wall Street se libra de la ola de despidos por la crisis hipotecaria
El sector financiero de EE UU ha perdido 88.000 empleos este año, de los que más de un tercio corresponden a pequeñas y medianas entidades afectadas por la crisis de lo préstamos subprime. De momento, Wall Street se ha mantenido a salvo de las turbulencias y los expertos no creen que se repitan los ajustes de crisis anteriores, como la de 2001.
En 2006 el sector financiero de EE UU perdió unos 50.300 empleos. En los ocho primeros meses de 2007, la crisis desatada por la situación del mercado de la vivienda y las hipotecas subprime ha disparado la cifra. De los más de 88.000 trabajos perdidos hasta ahora, según la consultora Challenger, Gray & Christmas, más de 36.000 están directamente relacionados con entidades hipotecarias, especializadas en el segmento de alto riesgo.
Los despidos responden a las quiebras, ceses de actividad total o parcial de unas 130 entidades del país desde el año pasado. La mayoría de las afectadas son las llamadas 'originadoras de hipotecas', aunque también hay banca comercial que ha reestructurado cartera o abandonado actividades de alto riesgo como Washington Mutual.
De momento, los recortes masivos no han llegado a Wall Street, a pesar del papel de la banca de inversión en la actual situación. Han provisto de capital, titulizado deuda e, incluso, se han animado a entrar en hipotecas. Para esto último han realizado adquisiciones de entidades centradas en este tipo de préstamos en los últimos dos años.
Sólo se han producido algunos despidos en casos puntuales, como Bear Stearns y Lehman, pero han sido pequeños comparados con el número total de trabajadores. El cierre de BNC, filial subprime de Lehman desde 2004, afecta al 4,2% de su plantilla.
'En estos departamentos hipotecarios hay despidos y los habrá porque este específico negocio subprime está acabado', dice Danny Sarch, fundador de la empresa de reclutamiento para el sector financiero Leitner Sarch Consultants. Sarch cuenta con que emergerán más problemas, pero no cree que la crisis se amplíe hasta Wall Street.
Aún se está lejos del ambiente que se respiraba en 2001 y 2002 en la gran banca. La desolación bursátil, tras el pinchazo de las puntocom, la recesión y el 11-S se saldaron con pérdidas de más de 43.000 empleos en Wall Street. Fue el ajuste más duro en 25 años. Sarch considera que se puede crear nuevo empleo. 'Estas firmas se nutren de gente que genera ingresos. Si se está en puestos en los que se hacen beneficios, se seguirá contratando'.
El consultor John Challenger es menos optimista. 'Hay más banderas rojas y el mejor momento para las contrataciones ha sido junio, ahora veremos alguna debilidad'. Challenger dice que, aunque estas firmas de inversión no están directamente asociadas al sector de la vivienda, algunas se han hecho muy vulnerables. Challenger opina que, si los mercados siguen convulsos y la crisis se profundiza, Wall Street sufrirá 'porque habrá menos tolerancia al riesgo'.
En lo que coinciden los expertos es que los bonus de este año no serán como los récord de 2006 (23.900 millones de dólares). Según el director de la consultora Options Group, Eric Moskowitz, se espera 'una caída media del 5%'. Explica que el descenso de los resultados en renta fija en el segundo trimestre arrastrará a la baja la retribución variable, ya que en los últimos trimestre 'han sido responsables de un significativo porcentaje de los ingresos totales'.
De cualquier modo, no se prevé que la caída sea un drama para Wall Street. Será más fuerte en los hedge funds e inexistente en banca de inversión y capital riesgo. En estos dos últimos sectores podrían subir un 10% respecto a 2006.
Una factura laboral con un efecto muy disperso
La factura laboral ha sido muy dispersa hasta ahora, ya que entre las implicadas figuran pequeñas y medianas entidades. Para John Challenger, de Challenger, Gray & Christmas, lo llamativo es la rapidez con la que la crisis se cobra empleos y cree que hay aspectos mejores a la de 2001: la economía no está en recesión, el paro es bajo y los afectados son profesionales poco especializados que pueden recolocarse. Eric Moskowitz, de Options Group, opina que en el sector de originadores de hipotecas y vendedores 'un tercio de ellos puede ser despedido si el negocio no se recupera a fin de año'. Además, a estos y a los encargados de CDO (titulización de deuda hipotecaria) el bonus se les reducirá entre un 20% y un 40%.