Villas de lujo para las vacaciones
El alquiler de residencias exclusivas ya no es un capricho para bolsillos millonarios
El Languedoc-Rosellon, al suroeste de Francia, es una de las rutas con más encanto del país. Un encuentro con la belleza y la historia, que empieza en sus señoriales casas, abiertas a un turismo de calidad que huye de la oferta hotelera clásica y busca alojamientos exclusivos. En Belvianes, por ejemplo, a 5 kilómetros de Quillan, en el departamento de Aude, donde dejaron huella los cátaros, se encuentra Le Chateau, una mansión del siglo XVIII, rodeada de un parque de 4.000 metros cuadrados. Un entorno que recuerda al Manderley de Rebeca. Su piscina de 40 metros cuadrados invita al huésped a pasar el día entre brazada y tumbona; en el interior, mobiliario de estilo en armonía con el equipamiento más moderno para lograr que la estancia sea perfecta.
No es una oferta aislada. Cada vez son más las personas que, dentro de una gama de vacaciones de calidad, optan por el alquiler de una villa con jardín, un apartamento de lujo o una mansión histórica, en entornos naturales, que garantizan la privacidad y ofrecen, en muchos casos, servicios exclusivos, desde un chef a un Ferrari.
Pero en glamour es difícil superar el que rodea a un castillo-palacio. Es el caso de Le Château de Craon, situado en la región de Loire, que se puede convertir en dorado refugio para las vacaciones. El edificio del siglo XVIII cuenta con el mobiliario, las alfombras o pinturas propias de su época originaria, a lo que se ha añadido instalaciones más modernas como pistas de tenis y piscinas. Todo rodeado de un parque de 40 hectáreas.
Otro de los encantos del país vecino es la Costa Azul. Una propuesta para disfrutar el sabor auténtico de St. Tropez es Villa Azure. Todo en la propiedad recuerda al mar, incluso hay un armazón de barco colgado en una de las salas de estar. Dispone de un salón separado de la casa que desemboca en una zona exterior de césped y a la piscina de 20 metros cuadrados. Las habitaciones, muy luminosas, tienen en la mayoría de los casos acceso directo desde la terraza delantera. Cada una cuenta con baño: el de la habitación principal, moderno; el resto, con las baldosas típicas de St. Tropez. Si el cliente lo desea, puede contratar los servicios de vehículo con chófer durante su estancia o el traslado al aeropuerto en limusina o helicóptero.
En Cannes, a 10 minutos en coche de La Croissette -el paseo por el que desfilan las estrellas del festival de cine- y a 30 del aeropuerto de Niza, Villa Carapace seduce por su original diseño en forma de concha de tortuga. Uno de sus atractivos es el suntuoso jardín con vistas sobre la bahía de Cannes y Antibes. El alquiler incluye un Ferrari 575 Maranello y un roadster Wiesmann descapotable (sólo pueden conducirse por Francia y Mónaco). Para relajarse, un baño en la piscina con forma de lágrima o el jacuzzi de uno de los dormitorios. Es posible contratar servicios de aviación privada o de cuidados de niños.
En el Lago de Lugano, Villa Renate, a ocho kilómetros de Porto Ceresio, está rodeada de un parque de 6.000 metros cuadrados. Se trata de una construcción histórica del siglo XIX, reformada en 2003. Se encuentra en un lugar tranquilo y soleado, en pleno campo. El interior está decorado con mobiliario antiguo y lujoso; en el salón grande, una chimenea proporciona calor en las tardes frías. Tan sólo la TV por satélite impide desconectar del mundo.
Para los más cosmopolitas, la isla griega de Mykonos ofrece diseño contemporáneo, amplios espacios e increíbles vistas en Villa Artiste, construida en diferentes alturas. La mejor publicidad se la hace el atardecer, cuando el sol se refleja en el océano y un baile de colores aparece ante los ojos de los invitados. Sin salir de Grecia, Villa Sandra, en Corfú, compite con el próximo palacio real de verano. La propiedad alterna espacios de bosques con cuidados jardines y proporciona sorprendentes vistas sobre el mar Jónico. La villa fue construida en tres secciones: la casa principal, el pabellón de invitados y un espacio independiente. La playa espera a los huéspedes al pie de la villa, o si lo prefieren pueden permanecer en la piscina de 20 metros cuadrados. La propiedad facilita una moto de agua o lancha.
Al otro lado del Atlántico también es posible encontrar un alojamiento diferente. En Puerto Rico, en el complejo El Conquistador & Golden Door's spa, considerado por los lectores de Celebrated Living, la revista de la clase premium de American Airlines, como uno de los más selectos de la isla, se puede alquilar una casa y acceder a todas las prestaciones de hotel de gran lujo, desde los restaurantes hasta las salas de hidromasajes o los baños japoneses. Porque dentro de ese complejo se encuentra Las Casitas Village, un rincón apartado sobre los acantilados.
Y en Costa Rica, cerca del parque nacional Manuel Antonio, es posible disfrutar, entre otras, de la Casa de las brisas. Con vistas al océano y al bosque tropical, cuenta con tres plantas y una piscina interior. El precio, unos 5.000 dólares por semana.
Otros destinos alrededor del mundo
¦bull; Marruecos. En Marraquech y otros lugares de la costa, ya sea la atlántica o la mediterránea, existen casas que en muchas ocasiones muestran el esplendor del lujo más exclusivo. Se puede optar por las que están ubicadas en urbanizaciones cerradas o por otras más urbanas. Los precios están en el entorno de los 500 euros al día, para una capacidad media de unas seis personas.¦bull; Seychelles. En ese lugar paradisiaco es posible alquilar alguna de las propiedades que bordean su costa. Un ejemplo: en la isla Mahé, un chalet con 3.000 metros cuadrados de jardín cuesta 945 euros por semana.
Residencias llenas de luz y encanto en la costa española
En la cima del Coll des Vent, una de las zonas más cotizadas de Ibiza, en el oeste de la isla, se encuentra Villa Malabata, en la que el blanco ibicenco se funde con el azul mediterráneo. Su propietario, un conocido diseñador de interiores y de muebles valenciano, se inspiró en los volúmenes cúbicos tradicionales de las casas ibicencas. La construcción original fue ampliada de acuerdo a un estilo contemporáneo. Paredes de cristal, ventiladores en el techo y pulidos suelos de piedra proporcionan una gran luminosidad. En el interior, muebles diseñados por el propietario y arte africano para estimular los sentidos. La villa, de 400 metros cuadrados, cuenta, entre otras estancias, con un espacioso salón con chimenea y un comedor tipo loft para ocho comensales con vistas al mar, apartamento de invitados, además de piscina y jardín. En el precio de 20.000 euros por semana (mínimo) se incluye la limpieza diaria, mayordomo y jardinero, entre otros servicios, pero también es posible alquilar un todoterreno, veleros o yates, contar con chef privado o tratamientos de belleza y masajes (www.indigolodges.es).Tranquilidad en la Costa Brava. Es lo que propone el municipio de Santa Cristina d'Aro, una perfecta combinación de mar y montaña. A un kilómetro de su centro, en pleno campo, se encuentra esta casa rústica del siglo XVII, reformada, en un terreno de 10.000 metros cuadrados. Dispone de salón con chimenea, cocina equipada con horno, lavavajillas y microondas, sala de estar con TV satélite y cinco dormitorios -tres de ellos con baño o ducha-, entre otras piezas. Cuenta también con piscina, ducha exterior, porche y aparcamiento.Está disponible en Interhome desde 42 euros por persona y día. En la Costa Blanca, en Jávea, en el tranquilo barrio de La Siesta, la agencia propone una villa con jardín de 1.000 metros cuadrados, con piscina y barbacoa. El espacio, de 180 metros cuadrados, se distribuye en un salón comedor con TV por cable, tres dormitorios y cocina. La casa está equipada con aire acondicionado y calefacción central. En el mobiliario se incluyen tumbonas. En el precio de 40 euros por persona y día se incluye cambio de lencería del hogar y limpieza una vez a la semana.