Choque frontal entre las rurales y Cajamar por la Caja Rural del Duero
La fusión de Cajamar y la Caja Rural del Duero acordada la semana pasada no ha sentado nada bien en algunas cooperativas de crédito. Varias entidades distribuyeron el pasado viernes un comunicado, encabezado por el logotipo del Grupo Caja Rural pero carente de remitente expreso, en el que se mostraban dispuestas a 'realizar una oferta a los socios de la Caja Rural del Duero que mejora sustancialmente la propuesta de Cajamar'.
El presidente de la Caja Rural de Burgos y de la Asociación de Cajas Rurales, Pedro García Romera, admitió respaldar dicho documento. El directivo precisó a Efe que 'mientras que con la oferta de Cajamar la Rural del Duero sería absorbida, con nuestra opción mantendría su identidad propia'.
Con su anuncio, los firmantes del documento tratan de asegurar la permanencia de la Rural del Duero en el Grupo Caja Rural, colectivo de donde fue expulsada Cajamar en 2002.
La Caja Rural del Duero emitió a su vez una nota oficial donde consideraba 'irrevocable' su unión con Cajamar y consideró que es una 'injerencia intolerable que desde instancias ajenas a la entidad se formulen propuestas divergentes con el acuerdo unánime del consejo rector equivalente del consejo de administración en una cooperativa'.
Los 25.733 socios de la entidad vallisoletana deberán aprobar la propuesta de fusión con Cajamar en una asamblea prevista para finales de agosto.