El Gobierno estima un crecimiento del PIB del 3,7% para este año, superior a lo previsto
El Gobierno elevará mañana su estimación de crecimiento de la economía española para este año desde el 3,4% previsto inicialmente hasta, al menos, el 3,7%, en línea con las estimaciones de los principales organismos nacionales e internacionales.
Además, aprobará el cuadro macroeconómico de 2008, que servirá de punto de partida para elaborar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del próximo año y que recogerá un crecimiento del PIB del entorno del 3,3%, lo que supone una ligera desaceleración respecto al aumento previsto para este año.
El Consejo de Ministros, el último antes de las vacaciones de verano, revisará así las grandes cifras del cuadro macroeconómico, como suele hacer todos los años por estas fechas, dado que es habitual que la previsión de crecimiento que figura en los Presupuestos se vea rebasada a medida que se conocen los datos de los primeros meses del año.
Así, la economía española creció, en términos de Contabilidad Nacional, un 4,1% en el primer trimestre del año, y la información más reciente del segundo trimestre (el dato oficial se conocerá el próximo 29 de agosto) indica que el PIB siguió creciendo a un ritmo similar al de los meses precedentes, que los analistas sitúan entre el 3,9% y el 4%.
De esta forma, el Ejecutivo considera que tras el techo del PIB en el primer trimestre del año (4,1%), la economía española iniciará una senda de ligera desaceleración a partir de entonces, pero aún así mantendrá este año una tasa de crecimiento muy superior al 3,5% interanual.
Sube la estimación de empleo
Además de la estimación del crecimiento, el Departamento de Pedro Solbes modificará también la composición del mismo, con nuevas previsiones de demanda interna y demanda externa y también elevará varias décimas la estimación de crecimiento del empleo como consecuencia del mayor aumento del PIB estimado.
En cuanto al cuadro macroeconómico del próximo año, que servirá de base para los últimos Presupuestos del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero antes de las elecciones del próximo año, la previsión de crecimiento podría situarse en el entorno del 3,3%.
El titular de Economía y Hacienda informará también de la previsión de su Departamento sobre los principales componentes de la demanda interna, como el consumo de los hogares y de las administraciones públicas, la construcción, la inversión en bienes de equipo, el empleo, y la evolución de exportaciones e importaciones, que apunta a una cierta mejoría.
Lo que no parece que se revisará, al menos de momento, es el objetivo de superávit de las administraciones públicas que el Gobierno se ha propuesto alcanzar este año (1% del PIB), aunque el propio Solbes ya ha adelantado que es muy probable que se supere esta previsión debido a la buena marcha de los ingresos fiscales.
Cuadro macroeconómico de 2008
Junto con la aprobación del cuadro macroeconómico, el titular de Economía apuntará mañana algunas de las líneas de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2008, si bien las partidas concretas de determinadas materias no se conocerán hasta después del verano, periodo en el que el Gobierno tiene previsto mantener contactos con los Grupos Parlamentarios.
De momento, el Ministerio de Economía y Hacienda ya ha adelantado que los PGE de 2008 darán prioridad a la I+D+i, a las infraestructuras y al gasto social, mientras que la Ley de Dependencia se dotará con unos 900 millones de euros.
Nueva Ley de opas
El Consejo de Ministros aprobará previsiblemente mañana el Real Decreto que contiene el reglamento que desarrolla la Ley de OPAs, que entrará en vigor el 13 de agosto.
Las novedades que introduce el Real Decreto de opas respecto al borrador son dos, fundamentalmente. Las opas aprobadas antes de la entrada en vigor de la ley se regirán por la normativa anterior, pero si surge una oferta competidora, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) puede autorizar que a la primera opa se le aplique también la nueva ley, que contiene ventajas para el primer oferente.
Además, se elimina la excepción a la formulación de una opa que incluía el borrador y que eximía a las compañías de presentar una oferta aunque alcanzaran el 30% de los derechos de voto de otra empresa si ésta última mantenía mecanismos de blindaje en sus estatutos.
De este modo, la nueva Ley de opas obligará a lanzar una oferta sobre el 100% cuando alguno de sus accionistas supere el 30% de los derechos de voto o haya nombrado a la mitad de los consejeros.
También estarán obligados a presentar una opa los accionistas que, en el momento en que entre en vigor la norma, controlen entre el 30 y el 50% del capital y aumenten su participación en más de un 5% en un año, cuando superen la mitad de los derechos de voto o cuando, por medio de la compra de participaciones adicionales, controlen la mitad del consejo de administración.