Sacyr elude la opa forzosa sobre Eiffage hasta que un juez vea el caso
La cúpula de Sacyr recibe un balón de oxígeno. El regulador bursátil francés dijo ayer al juez que su decisión de que la constructora lance una opa obligatoria superior por Eiffage no tiene que cumplirse antes de que el tribunal decida sobre la acusación de concertación entre Sacyr y otros accionistas españoles.
La marcha atrás del regulador galo, la Autorité des Marchés Financiers (AMF), da un respiro a la directiva de Sacyr justo antes de irse de vacaciones. La AMF declaró ayer ante el Tribunal de Apelación de París que su decisión del 26 de junio de obligar a la española a lanzar otra opa por Eiffage 'no tiene carácter ejecutorio' hasta que 'se pronuncie' este tribunal sobre la concertación de la que la AMF acusa a Sacyr con otros seis accionistas españoles de Eiffage. Así, la CNMV gala está dando argumentos al juez para que éste suspenda esta obligatoriedad de otra opa y le pide que decida sobre el fondo de su acusación antes de exigir otra oferta.
Es muy probable que el magistrado así lo refleje en el auto previsto para el jueves. Sobre todo porque, curiosamente, ni la constructora francesa ni los directivos accionistas (con el presidente del grupo, Jean-François Roverato, principal opositor de Sacyr, al frente) no se han opuesto al giro que ahora da la AMF.
Con ello, el tribunal aceptaría las medidas cautelares que planteó Sacyr y le permite ganar tiempo hasta final de año (cuando se espera el dictamen sobre el caso) para que planifique una nueva oferta. Los abogados de Sacyr argumentaron ayer ante el magistrado que una opa forzosa ahora por el 66,7% que no tiene en la francesa puede tener 'consecuencias importantes e irremediables', según fuentes próximas a la constructora.
La única voz en contra ayer fue la del fondo británico Elliot, que tiene en torno a un 10% de la filial de autopistas de Eiffage, APRR, por la que Sacyr tendría que lanzar también una oferta. Elliot pidió una opa inmediata.
Ahora, el grupo que preside Luis del Rivero tiene más tiempo para planificar con calma una nueva oferta en metálico en vez de con canje de acciones y al menos un 21% superior, a 127,29 euros (lo que supone valorar la tercera constructora gala en 11.860 millones). Aunque el hecho de que Eiffage también apoye suspender la obligatoriedad de otra opa inmediata deja en el aire la incógnita de si se abre a la entrada de Sacyr que lleva bloqueando un año y medio.