Las directivas no quieren cuotas en los consejos
Apoyan la Ley de Igualdad, pero temen que se cuestione su valía.
Han criado uno, dos y hasta tres hijos. Trabajan en multinacionales, grandes empresas españolas y pymes. Saben lo que es tener que elegir entre un ascenso y la familia y se enfrentan a menudo con problemas para conciliar la vida laboral y personal. Son las ejecutivas españolas.
Adecco, multinacional de Recursos Humanos, ha querido conocer los deseos, inquietudes y problemas de estas mujeres: 350 directivas han acudido a esta convocatoria y han dado su opinión sobre la Ley de Igualdad, la conciliación y la situación de la mujer en el mundo de los negocios.
Trabajan en un mundo de hombres, y lo saben. De hecho, la gran mayoría denuncia que las trabajadoras no gozan de una situación de igualdad en la empresa. Y sólo un porcentaje exiguo, algo más del 6%, cree que la paridad es una meta alcanzada.
Se sienten discriminadas en los procesos de selección y en el salario, y a pesar de ello, llama la atención el hecho de que la mitad de las mujeres consultadas por Adecco piense que las cuotas en los consejos de administración les perjudica 'porque la medida puede arrojar una sombra de duda sobre nuestra valía a la hora de alcanzar esta posición', dicen. Sólo un 35,5% opina que esta medida, que debería tener un carácter transitorio, ayudará a mejorar la situación laboral de las mujeres en general, y de las directivas en particular.
La nueva Ley de Igualdad, aprobada el pasado 22 de marzo, es valorada muy positivamente por la gran mayoría de las entrevistadas, y sólo un 18% percibe un cierto cariz intervencionista en los órganos de dirección de la empresa. Aún así, algo más de la mitad de las consultadas reconoce que el 'miedo y el desconocimiento de cuál será su impacto económico' impedirán la correcta aplicación de la norma.
De todas las medidas recogidas en la nueva Ley de Igualdad, la mejor aceptada ha sido el permiso de paternidad, que es recibida con satisfacción por el 94% de las entrevistadas, pues contribuirá a que la conciliación 'no competa sólo a las mujeres', dicen. Con todo, el debate no parece cerrado: el 43,7% la consideran insuficiente y un 4,3% opina que es un gasto que repercutirá negativamente en la competitividad de las compañías españolas. Por su parte, un 2% estima, simplemente, que no es necesaria.
Las ejecutivas desvelan que a la conciliación le queda aún un largo camino por recorrer en España. Cuando se les pregunta acerca de las medidas adoptadas en sus respectivas empresas, casi el 20% reconoce que 'no existen' y más de la mitad las considera 'insuficientes'. Un 13,58% denuncia que su compañía no tiene previsto regular este asunto 'por el momento' y sólo el 3,7% reconoce que gracias a la promulgación de la norma la entidad donde trabajan baraja implantar algún tipo de 'solución conciliadora'.
A las mujeres ejecutivas les irrita la discriminación salarial 'encubierta'. Lo que suelen hacer las empresas, explican las directivas en sus comentarios, es atribuir a las féminas una categoría profesional inferior (y, por tanto, con inferior sueldo), aunque éstas estén desempeñando las mismas funciones que sus colegas masculinos. Aún así, un 22% cree que ya no existen estas diferencias de sueldo.
Pese a lo anterior, resulta llamativo que el 64,6% de las encuestadas asegure que nunca ha visto frenada su carrera profesional por el hecho de ser mujer y que el 73% afirme no haber tenido enfrentamientos con un empleado por ser mujer y superior. Sólo el 4,3% dice conocer estas situaciones, e incluso haberla vivido varias veces.
Conciliación, horario flexible y trabajo por objetivos
La conciliación de la vida laboral y personal es una de las principales preocupaciones de cualquier trabajador y uno de los aspectos más significativos de la Ley de Igualdad.El 60,5% de las directivas entrevistadas por Adecco reconoce haber tenido problemas para conciliar su vida laboral y personal y un 29,6% afirma tenerlos 'a menudo'. Sólo un 10% afirma que 'nunca' tuvo dificultades para realizar satisfactoriamente ambas tareas.El horario es uno de los factores que más negativamente influyen en la conciliación. La práctica totalidad de las mujeres que han participado en la encuesta asegura que éste les perjudica y dificulta su capacidad para atender todas las tareas que implica ser madre, trabajadora y directiva.El 82,1% de las ejecutivas son partidarias de un 'horario intensivo, flexible, de entrada y de salida'. Y a la hora de plantearse el teletrabajo como posible opción favorecedora de la conciliación, las encuestas son unánimes en su respuesta: el 95% se muestran partidarias de esta medida. En concreto, un 51,3% opina que 'lo importante' es trabajar por objetivos, independientemente de la presencia en el lugar de trabajo, mientras que un 43,7% opina que la mejor opción es la combinación de 'teletrabajo y jornada presencial'.Por el contrario, sólo un 5% no confía en esta modalidad porque 'disminuye el rendimiento y es una moda pasajera'.