Las grandes fortunas apuestan por Europa
Las grandes fortunas reducen su apuesta por la renta variable española y dirigen sus inversiones al exterior
Como el niño que emula en el patio de colegio los malabarismos de Ronaldinho, los pequeños y medianos inversores también pueden hacer una cartera que replique proporcionalmente la de Amancio Ortega, presidente de Inditex, o Alicia Koplowitz. Y los números indican que los millonarios priman la renta variable extranjera por encima de la española.
La obligación de remitir a la CNMV los movimientos de las sicav -el mecanismo más común de inversión de los grandes patrimonios- permite conocer con detalle en qué invierten los más ricos. Los datos del primer trimestre acentúan una tendencia que ya se observó a finales del año pasado: la Bolsa española ha perdido atractivo. De los 648 millones de la mayor sicav de Amancio Ortega, el 12,84% está en renta variable española. Un año antes el porcentaje era del 31%. Y a medida que baja la inversión en España aumenta, en una proporción similar, el dinero destinado al mercado exterior.
Lo mismo sucede en las sicav de Alicia Koplowitz, de Manuel Jove, fundador de Fadesa, o de la familia Sanahuja, máximos accionistas de Metrovacesa. Así, parece que hay una cierta correlación entre lo que dice la banca privada y lo que hacen los ricos. Lo cierto es que el mercado tiene muy en cuenta las inversiones de los millonarios ya que se presupone que gozan de buena información y aglutinan a su alrededor a un grupo de expertos que sólo trabajan para ellos.
Morinvest, la sicav de Alicia Koplowitz, sigue los pasos de Amancio Ortega. En el primer trimestre de 2007 mantenía un 24,38% de su patrimonio en renta variable española, un nivel muy inferior al 41,45% de un año atrás. Y si en el segundo trimestre de 2006, Koplowitz destinaba 231 millones a la renta variable extranjera, durante los tres primeros meses de 2007, la inversión en Bolsa y fondos foráneos alcanzó los 313 millones de euros.
La excepción a la tónica dominante viene de la Familia del Pino, máximos accionistas de Ferrovial, y de Juan Abelló, accionista mayoritario de Sacyr Vallehermoso. Ambos han aumentado su presencia en el mercado bursátil interior. Ahora bien, la familia del Pino sólo destina el 9,35% del patrimonio de su sicav en el Ibex. En concreto, toda su inversión se reparte entre Iberdrola y Cepsa. El dinero en renta variable extranjera supone el 40% del total. La CNMV aún no ha publicado los datos del primer trimestre de la sicav de Juan Abelló, Arberin. Y si bien es cierto que en el último trimestre del 2006 aumentó su participación en la renta variable española, sigue siendo inferior al porcentaje que invertía un año atrás. Al igual que la familia del Pino, Abelló confía más en los mercados extranjeros, no en vano, destina el 72% de su sicav.
A pesar del poco atractivo de la renta variable española, el 37,86% de la sicav de la familia Sanahuja fluctúa en el mercado interior. Aun así, ha reducido considerablemente el porcentaje. El trimestre anterior invertían en España más de la mitad de su patrimonio.
Quien no está dispuesta a jugarse ni un duro en el mercado español es la ex mujer de Amancio Ortega y segunda accionista de Inditex, Rosalía Mera. Y eso que es, de largo, la más arriesgada dentro del club de los millonarios. El 93,4% de su sicav, que alcanza los 327 millones de euros, lo destina a renta variable en el exterior. En el lado opuesto, Isak Andic, propietario de Mango, huye de la renta variable. Su sicav invierte el 90% en renta fija española y el resto, en extranjera.
Con todo, el cambio más espectacular de un trimestre a otro lo ha protagonizado la familia Lladró. A finales de 2006 invertían el 56% de su patrimonio en renta variable española, un trimestre más tarde, la renta fija suponía el 65% de la cartera.
Dentro de la renta variable, tal y como recomiendan bancos como Morgan Stanley, los millonarios españoles se decantan por las empresas de mayor capitalización.
Simpatía por el sector bancario
El sector bancario es el que aparece con mayor asiduidad en las sicav. Y más en concreto, el BBVA y el Santander. Un movimiento interesante fue el de Amancio Ortega, que de un trimestre a otro pasó de invertir el 39,8% de su renta variable en el Santander durante el último trimestre de 2006 a no tener ni un euro en el banco presidido por Emilio Botín. En otras palabras, durante el primer trimestre de 2007, Amancio Ortega sacó 47 millones de euros del Banco de Santander. Parte de este dinero se fue al BBVA. Actualmente, la mayor sicav del empresario gallego invierte en Repsol el 30% del dinero destinado a renta variable. La compañía petrolífera también es la principal inversión de la familia Sanahuja.
El interés que despierta el sector bancario queda plasmado en la cartera de Manuel Jove. De los cuatro valores que invierte a través de su sicav Doniños, tres son bancos: el Sabadell, el Pastor y el Santander. De Juan Abelló, destaca su interés por empresas con una capitalización bursátil discreta, como puede ser el caso de Cemento Molins, levemente superior a los 1.600 millones de euros. A finales de 2006, el accionista de Sacyr Vallehermoso mantenía dos millones de euros en la cementera.
Alicia Koplowitz, por su parte, desinvirtió durante el primer trimestre en la inmobiliaria Colonial, compañía de la que posee el 8,9% de las acciones. La conocida empresaria tenía el 2,9% del patrimonio destinado a renta variable en la constructora a finales del año pasado. En cambio, de la otra empresa que también es accionista significativa, Acerinox, Koplowitz aumentó su participación. De hecho, ninguno de los grandes patrimonios confía ya en las inmobiliarias. A excepción de Amancio Ortega, que durante el primer trimestre del 2007 invirtió unos dos millones de euros en Inbesós. Desde el pasado seis de febrero -cuando la inmobiliaria alcanzó su máximo- Inbesós ha caído un 43%.
La renta fija gana adeptos en las fortunas
De las diez sicav estudiadas, seis han aumentado la inversión en renta fija española. Amancio Ortega, Alicia Koplowitz, Juan Abelló y la familia Entrecanales han ido en la dirección opuesta. La inversión en renta fija de las grandes fortunas españolas es relativamente baja, con excepciones como Isak Andic o la familia Lladró, cuyas sociedades de inversión destinan en renta fija el 90% y el 65%, respectivamente. Lladró ha invertido en el tesoro público 22 millones de euros.Amancio Ortega, cuya sicav es la mayor de España, ha depositado casi 90 millones de euros en bonos del Estado. La única sociedad de inversión capaz de hacer sombra a la del propietario de Inditex, es la de Alicia Koplowitz, Morinvest, cuya inversión en renta fija ha disminuido considerablemente durante el primer trimestre de 2007. Ha pasado del 15,92% al 9,24%.Según un informe de la división de banca privada del Santander, a medida que aumenta el patrimonio, desciende la inversión en renta fija y aumenta en variable. Aún así, el último estudio de Merrill Lynch sobre la riqueza en el mundo apunta que los inversores europeos aún están lejos de la cultura financiera de los estadounidenses, que destinan el 41% de sus inversiones en renta variable. En Europa el porcentaje es del 30%.