La juez ordena parar el traslado de maquinaria de Delphi a otras fábricas
La juez que tramita el procedimiento de quiebra de Delphi en España ha ordenado a la compañía que paralice el traslado de la maquinaria de la factoría de Puerto Real a otras plantas de la empresa en Europa.
La administración concursal que tramita la suspensión de pagos de Delphi Puerto Real le ha dado la razón a los sindicatos y a la Junta de Andalucía, que habían denunciado desvío de maquinaria de la planta gaditana, y ha ordenado a la multinacional que paralice el traslado de estos activos, localizados en plantas de la compañía en Europa, según anunció ayer UGT.
El sindicato indicó que la ejecución de esta medida 'va a suponer la paralización gradual de la producción de componentes de las cadenas de montaje a nivel mundial de Opel, Ford, Toyota, BMW y otras marcas importantes del sector de automoción'.
Esta decisión, según UGT, avala la petición sindical de que se investigara la desviación de activos propiedad de la planta puertorrealeña y 'pone de manifiesto que el concurso de acreedores y el expediente de extinción de contratos presentado por Delphi responden a una estrategia estudiada y premeditada para deslocalizar la producción' por parte de la multinacional.
A raíz de la presentación de este concurso de acreedores, UGT anunció que está estudiando iniciar ciertas actuaciones por vía penal 'que permitan depurar las responsabilidades en la quiebra de las plantas de Puerto Real'.
Mientras el procedimiento legal sigue su curso, las negociaciones entre la compañía y los sindicatos permanecen paralizadas a escasos días de que expire el plazo dado por la juez para un entendimiento entre las partes. El pasado lunes, cuando debió celebrarse una última reunión con la oferta final de Delphi, el encuentro quedó aplazado a instancias de la empresa, que pidió más tiempo para consultar a su matriz de EE UU sobre la cesión de activos que reclaman los trabajadores.
Los sindicatos exigieron en principio los activos y patentes, cartera de clientes y la conversión de los 1.600 despidos en un expediente de regulación temporal de empleo. Ante la negativa de Delphi, pidieron 500 millones para industrializar la comarca, una pretensión calificada de 'desorbitada' por la multinacional.
Un verano conflictivo si no hay acuerdo a primeros de julio
El comité de empresa de Delphi se prepara para unos meses de julio y agosto 'calientes' de movilizaciones si no hay acuerdo con la empresa antes del 2 de julio, cuando termina el plazo dado por la juez para que las partes lleguen a un acuerdo. A partir de esta fecha es posible que la plantilla tenga dificultades para cobrar las nóminas, lo que tensaría los ánimos todavía más. El presidente del comité, Antonio Pina, pide a la compañía un esfuerzo por alcanzar un acuerdo al igual que se ha hecho en EE UU con el sindicato mayoritario que presenta a los trabajadores.