La UE opta por no castigar a Bucarest y Sofía por corrupción

Rumanía y Bulgaria se libraron ayer de la posibilidad de que la Comisión Europea activase las cláusulas de salvaguarda previstas en sus tratados de adhesión a la UE. Bruselas asegura en un informe sobre los dos países que ingresaron en el club el pasado 1 de enero que siguen existiendo 'problemas profundamente enraizados, notablemente el crimen organizado y la corrupción'. Aún así, el organismo comunitario renuncia a proponer restricciones en materia de cooperación judicial o policial con los dos países. 'Hace falta más tiempo para comprobar que las reformas en marcha se aplican', justifica Bruselas su benevolencia. En 2008, pasarán el penúltimo examen.