El PSOE cambiará la deducción en vivienda por las ayudas directas
Simplificación impositiva, replanteamiento de las deducciones fiscales en sectores como el de la vivienda y mejoras tributarias para las empresas. æpermil;stos son algunos de los grandes ejes sobre los que girará el programa del PSOE para las elecciones, esbozado ayer por su responsable de Economía y Empleo, Inmaculada Rodríguez-Piñero.
La promesa de nuevas rebajas fiscales no será exclusiva del PP en la próxima campaña electoral. El PSOE también incorporará a su oferta reducciones tributarias en el impuesto sobre la renta y en sociedades, más allá de la reforma fiscal promovida por el vicepresidente Pedro Solbes que entró en vigor en enero, aunque José Luis Rodríguez Zapatero precisó ayer que antes de concretarse habrá que conocer primero el impacto de esta última. La secretaria de Economía y Empleo del PSOE avanzó ayer en el Foro de la Nueva Economía algunas propuestas electorales.
En el IRPF se elevarán los mínimos exentos y se reducirán los tipos máximos. Habrá una simplificación del impuesto y algunas de sus deducciones, como las de vivienda se eliminarán de forma progresiva para sustituirlas por ayudas directas que contribuyan a rebajar los precios de los pisos. El gasto fiscal en 2007 por este concepto suma 3.800 millones. La lógica falta de resultados inmediatos en la política de vivienda promovida por el Gobierno, argumentó Rodríguez-Piñero, hace necesario el progresivo trasvase de los recursos que se dedican a las desgravaciones hacia estas políticas activas.
No obstante, a última hora de la tarde Rodríguez-Piñeiro matizó sus declaraciones con una nota en la que aclaró que 'mientras no exista una oferta de vivienda a precio asequible para atender las necesidades de ciudadanía, las deducciones mantendrán toda su vigencia'.
En opinión de Rodríguez-Piñero, la coyuntura ofrece margen para encarar en la próxima legislatura una nueva rebaja en el impuesto de sociedades. Esta reducción no debería ir acompañada, a su juicio, de una subida del IVA ya que se trata de un tributo que no es progresivo. 'El objetivo de redistribución de la renta se logra con mayor eficiencia por la vía del gasto que por la del ingreso', dijo.
El programa del PSOE hará hincapié en la flexibilización laboral. Apostará por una negociación colectiva que permita una mejor adaptación a las circunstancias particulares de empresarios y trabajadores. Se inclinará por medidas que avancen hacia una mayor correspondencia entre salario y productividad, y hacia la prolongación de la vida laboral más allá de los 65 años, frenando las prejubilaciones. El abaratamiento del despido se encararía si naciera de una exigencia común de empresarios y sindicatos.
Energía. No se construirán nuevas centrales nucleares
Garantizar el suministro energético y la responsabilidad medioambiental son dos de las premisas sobre las que el PSOE hará descansar su programa de energía, en el que quedará descartada la construcción de nuevas centrales nucleares. 'Apostamos por lo que es seguro, rentable y eficiente. Las nucleares no son la panacea de ese modelo', enfatizó Inmaculada Rodríguez-Piñero, a escasos metros de la mesa en la que siguieron su discurso el presidente de ACS, Florentino Pérez, el de Iberdrola, Ignacio Sánchez-Galán, y el de Repsol, Antonio Brufau.La responsable de Economía del PSOE, recordó, no obstante, que el Ministerio de Industria tiene pendiente de recibir un estudio sobre el sector energético que servirá para tomar decisiones. En todo caso, dijo, la redefinición de la oferta llevará a aumentar la participación de las energías renovables, a afianzar las relaciones con los países exportadores y a reforzar las infraestructuras de transporte energético.
Política social. Prioridad para los incentivos a la natalidad
La buena marcha de la política económica, que calificó como un 'éxito silencioso', se está traduciendo, recordó Rodríguez-Piñero, en una tasa de crecimiento del 4,1%, un ritmo de creación de empleo del 3% y una tasa de aumento de la inversión en bienes de equipo del 12,1%. Esta foto fija permitirá, en su opinión, desarrollar en la próxima legislatura una política social que descansará en varias prioridades: una de ellas será la aplicación efectiva de la denominada ley de Dependencia y la otra la reorientación de estas políticas hacia el objetivo de facilitar la natalidad. 'La política social del futuro debe facilitar las condiciones de vida para que tener hijos deje de ser una carrera de obstáculos', defendió.El programa socialista recogerá también la necesidad de alcanzar un mayor equilibrio entre las aportaciones a la Seguridad Social y las pensiones, lo que implicará frenar las prejubilaciones y estimular la prolongación voluntaria de la edad de jubilación.