Aumenta el descontento de los accionistas de Yahoo por la retribución del presidente
'Reto al consejo', 'Los accionistas envían un mensaje', 'Semel pierde apoyos'... fueron algunos de los titulares de la prensa estadounidense sobre la junta de accionistas de Yahoo, celebrada el martes. Y es que Terry Semel, presidente y consejero delegado, vuelve a vivir tiempos complicados al frente de la empresa.
La reelección de consejeros recibió el apoyo de sólo el 66% de los accionistas frente al 95% de 2006. 'Los accionistas han mostrado su descontento', señaló Vishesh Kumar, columnista de TheStreet.com. Eric Jackson, uno de los inversores activistas que más ha criticado a Semel en los últimos meses, fue uno de los protagonistas de la junta. Jackson, que ha empleado vehículos como Youtube, portal de vídeos perteneciente a Google, y Flickr para darse a conocer, comentó la falta de detalles en las explicaciones sobre la estrategia de la empresa. Además, insistió en la mala calidad de servicios como Yahoo Go.
Y no fue el único. Los representantes del grupo de asesoría Proxy Governance o del United Brotherhood of Carpenters Pension Fund también comparecieron para mostrar sus desavenencias con respecto a las retribuciones personales de Semel.
El consejero delegado de Yahoo recibió más de 71 millones de dólares en 2006, un salario considerado como desorbitante por algunos de los presentes. Y más, según ellos, cuando el valor de las acciones de Yahoo ha caído un 10% en el último año frente a una subida del Nasdaq del 25% en igual período.
Tras la junta, en diversos blogs especializados de EE UU se ha vuelto a comentar la posibilidad sobre una salida de Semel de la compañía y el nombramiento de Susan Decker, actual vicepresidenta ejecutiva y responsable de publicidad, como nueva consejera delegada. A principios de 2007, en los mercados se especuló con un movimiento de estas características.
Quizá los acontecimientos se desencadenen en las próximas semanas. Todo puede depender de los resultados del segundo trimestre y especialmente del impacto entre los clientes del Proyecto Panamá, la plataforma publicitaria inaugurada en febrero con la que Yahoo aspira a recortar diferencias con Google.