Los lazos que se tejen tras el negocio familiar
Inma Puig analiza la gestión emocional en 'Retrato de familia'
Cuando Alejandro heredó la mayor parte de las acciones de la empresa familiar empezó el calvario. Dejó su empleo y se propuso modernizar las instalaciones, pero chocó con la oposición de los otros accionistas: su hermano y su madre. No le quedó otra salida que despedir al primero y cesar a su progenitora. Ahora las perspectivas de la empresa son optimistas, pero no tiene familia.
La sucesión es uno de los temas más difíciles en la empresa familiar, pero también el diferente trato a los hijos o el problema de los no familiares integrados en la empresa. Abundan los problemas, aunque no se abordan desde el punto de vista emocional, se analizan desde la perspectiva organizativa, jurídica o financiera.
Inma Puig trabaja desde hace 20 años como terapeuta de familias y como asesora de empresas y a menudo le preguntan si siempre tiene que haber problemas en la empresa familiar. Su respuesta es que en todas las familias se discute y en todas las empresas hay rivalidades y enfrentamientos personales. '¿Por qué habría de ser diferente una empresa familiar?'.
Esta profesora de Esade da la palabra a los protagonistas de estas empresas en Retratos de familia, editado en la colección Empresa activa de Ediciones Urano, un libro estructurado en torno a diez testimonios ficticios, sacados de la realidad, que describen situaciones bastante comunes. Son historias que han ido apareciendo a lo largo del ejercicio de la profesión de Inma Puig. No hay fórmulas mágicas. Son experiencias que ayudan a comprender el problema, averiguar sus causas y ponerse en el lugar del otro, pues, según la autora, puede ser una manera que ayude a resolverlo.
'En 2006 había censadas en España 2,5 millones de empresas familiares que daban trabajo a nueve millones de personas y que representan el 65% del PIB. Siempre se ha hablado de ellas desde la perspectiva económica o de los problemas de la sucesión, pero en este libro, analizo su vertiente emocional', añade la autora.
A través de diferentes testimonios, Inma Puig da una visión poliédrica de la empresa familiar. 'El empresario te describe una empresa, su mujer otra, los hijos en función de su posición numérica en la familia otra y, por supuesto, los familiares políticos otras diferentes, pero en realidad, la empresa no es ninguna de ellas y es todas la mismo tiempo'.
Inma Puig, responsable también de las Relaciones Humanas Deportivas en varias instituciones, entre ellas el FC Barcelona, está satisfecha con el resultado, especialmente cuando algunos empresarios reconocen que se identifican con lo que los protagonistas de los casos sienten, concluye.
Una herramienta de comunicación
Los libros de empresa están de moda, pero hay pocos títulos dedicados a la gestión de las emociones en la empresa familiar. 'Retratos de Familia es un libro que pretende ser una herramienta de comunicación propiciada por la reflexión de su lectura', explica la autora.Los empresarios disponen de herramientas para solucionar los problemas que surgen día a día, pero ¿qué ocurre cuando el jefe insoportable es el padre? ¿Qué hacer si el empleado molesto es el cuñado? O ¿cómo se reacciona ante la decisión del padre de primar en la herencia al hijo que se ha desvinculado del negocio en lugar de al que se ha dedicado en cuerpo y alma? Inma Puig aporta una nueva mirada sobre el mundo de la empresa familiar.