El Senado aprueba las directivas sobre los mercados del gas y la electricidad
Las reformas de la Ley Eléctrica y la Ley de Hidrocarburos superó ayer definitivamente su trámite en el Senado. Esta Cámara dio luz verde a unas reformas que suponen adaptar la normativa energética española a las directivas europeas sobre liberalización de los mercados del gas y de la electricidad, respectivamente, cuya transposición estaba pendiente desde junio de 2004.
Una vez superado el trámite del Senado, en el que el PSOE (que no tiene en él la mayoría) se vio obligado a buscar un pacto (concretamente, con el grupo popular), a las directivas sólo les queda su refrendo definitivo por el Pleno del Congreso. Algo que ocurrirá en pocas semanas.
En el caso de la ley eléctrica, la reforma avanza en la separación funcional de la gestión de las redes de distribución y de transporte. En este caso, las redes que todavía están en manos de las empresas eléctricas deberán pasar al operador del sistema, REE.
Respecto a las funciones de la Comisión de la Energía, el Gobierno ha optado por la versión más conservadora de la normativa comunitaria y no le ha cedido potestades (como la fijación de la tarifa) que permiten las directivas. En cuanto a la función sancionadora (la CNE sólo puede proponer multas) y a que sus dictámenes vinculantes no fuesen recurridos ante Industria (propuestas del regulador que fue recogida por algún grupo, como el PNV) Industria ha optado por mantener la situación actual y compartir con la CNE el papel regulador.
En cuanto a la ley de hidrocarburos, que limita al 5% la participación máxima de un inversor en el capital de Enagás, reserva la posibilidad de que el sector público pueda superar ese límite.
Precisamente, ayer, tras la sesión de control del Senado, el ministro de Industria, Joan Clos, volvió a defender las bondades del nuevo real decreto del régimen especial, que supone un cambio en la regulación de estas energías. Tras fuertes críticas y presiones, también las empresas eólicas, han terminado defendiendo un real decreto que entró en vigor el sábado.