El riesgo de viajar a regiones exóticas sin consejo médico
Llega el verano y los españoles ya hace tiempo que no se conforman con Benidorm. En el imaginario colectivo aparecen lejanos países tropicales, con paradisiacas playas y frutas exóticas. Pero ese lugar soñado que cuelga en el póster de la agencia de viajes puede ser demasiado para el sobreprotegido cuerpo occidental.
En torno a un 70% de los españoles que viajan a países con alto riesgo de contraer enfermedades o infecciones no cumple con las medidas sanitarias recomendadas. De estos, un 10% deberá consultar a un médico a su regreso por problemas de salud. Son datos que aparecen en el libro Geografía de las infecciones tropicales, que ayer presentaron su autores, los médicos Rogelio López-Vélez y Esteban Martín Echevarría, en Madrid.
Malaria, ébola, sífilis, fiebre amarilla, fiebre tifoidea, y así hasta 218 enfermedades son analizadas en el libro. Se explica dónde se contraen, los síntomas para diagnosticar la enfermedad, el tratamiento y la prevención y control. A pesar de que puede ser un libro útil para el ciudadano de a pie, está más dirigido a los médicos, la mayoría de los cuales no han estudiado a fondo las enfermedades tropicales en la universidad. Enfermedades que, según Rogelio López Vélez, jefe de la Unidad de Medicina Tropical del hospital Ramón y Cajal de Madrid, ya han dejado de ser exóticas, pues debido al efecto migratorio y a que los españoles cada vez viajan más, las consultas se han multiplicado. Cada año, unos 13 millones de españoles viajan al extranjero y unos 370.000, lo hacen en países situados en zonas tropicales consideradas de alto riesgo.
No se trata, según los autores del libro, de crear alarma social. Se puede ir a cualquier punto del planeta, pero, eso sí, con precauciones. Lo dice el doctor Rogelio López Vélez, que pasó dos años de su vida viviendo, junto a su familia, en el trópico. Hay que ser especialmente cuidadoso si se viaja a África subsahariana, a América Central y del Sur y al subcontinente indio. En cualquier caso, antes de desplazarse es recomendable acudir al centro sanitario más próximo para saber si es necesario vacunarse, tomar periódicamente algún medicamento o adquirir un spray repelente contra los mosquitos, transmisores de muchas enfermedades. Aparte del destino, es 'importante' conocer el tiempo de estancia y la zona concreta que se visitará en el país.
La diarrea, la enfermedad más común
Con todo, la infección más común tras viajar a estos países es la diarrea, no en vano también conocida por el mal del viajero. Aunque la enfermedad más peligrosa sigue siendo la malaria, que se da sobre todo en África, América Central y del Sur y en el sureste asiático. En Europa, cada año, se registran unos 15.000 casos de malaria. Aunque se estima que son el doble, ya que muchos médicos no la declaran en los formularios. En España, se pueden dar unos 600 u 800 casos anuales. Y cada año 'hay uno o dos muertos por malaria', según López Vélez.
Para la malaria no hay vacunas. Se debe tomar medicación (profilaxis) durante y después del viaje, así como ir equipado de mosquiteras, ropa adecuada, insecticida y repelente. A pesar de que la enfermedad es relativamente fácil de curar, puede agravarse si no se diagnostica a tiempo. Por ello los médicos recomiendan fervientemente que si tras un viaje de riesgo aparece fiebre o diarrea, se acuda al médico al instante. Puede que se trate de un simple catarro, pero también pueden ser síntomas de enfermedades más peligrosas.
Con todo, el doctor López Vélez aseguró que el conocimiento de este tipo de enfermedades es cada vez mayor y que 'muchos de estos enfermos son derivados correctamente desde el primer nivel asistencial, lo que se debe fundamentalmente al mayor conocimiento que hay en torno a las infecciones tropicales'. Ahora bien, las enfermedades y los virus también viajan y por ello es necesario 'que los médicos estén permanentemente al día sobre las zonas de riesgo y los brotes epidémicos para poder acertar en los diagnósticos'.
Los autores criticaron a las agencias de viajes por no informar debidamente sobre los riesgos de viajar a ciertos países. 'Creen que si recomiendan a sus clientes que se vacunen antes van a perder un billete', argumentaron. En su opinión, los primeros interesados en dar una información completa son las agencias de viajes. 'Si un turista vuelve con diarrea y fiebre debido a que la agencia no le avisó de que debía vacunarse o tomar medicinas es probable que no vuelva a viajar con esa agencia', dijo. Por ello, uno de los próximos proyectos de Rogelio López Vélez es impulsar las agencias de viajes saludables. A pesar de que aún es un proyecto en estado embrionario, la idea es crear una mayor complicidad entre los touroperadores y la sanidad.
El peligro del aventurero y el inmigrante
Los grupos de mayor riesgo a la hora de sufrir una enfermedad tropical son los viajeros de aventura y los inmigrantes. Los primeros suelen caer por permanecer fuera de las rutas turísticas y someterse así a mayores factores de riesgo. Los inmigrantes, por su parte, suelen enfermar cuando regresan a ver a sus parientes en los países de origen. El problema es que muchos inmigrantes no acuden a los centros antes de partir porque cuando vivían en su país nunca enfermaron. Sin embargo, según explicó el doctor Rogelio López Vélez, dos años fuera de casa son suficientes para perder la inmunidad.