PSA se impone una reducción de costes del 30% hasta 2010
PSA-Citroën reducirá drásticamente sus costes de estructura en el horizonte de 2010 en un contexto de feroz competición y de extrema fortaleza del euro. EL presidente, Christian Streiff, avisó de que el grupo aún podría decidir el cierre de alguna planta.
PSA Peugeot Citroën debe adelgazar su estructura si quiere seguir siendo competitiva. Después de una caída en la rentabilidad del 2% en 2006, de la pérdida de cuota de mercado en Europa y en un contexto frágil generalizado del mercado automovilístico, el constructor galo se impondrá una reducción de costes del 30% en el horizonte de 2010.
Tal es la consigna del plan CAP 2010, la estrategia de reestructuración en la que ha trabajado el núcleo duro de la compañía durante los últimos tres meses y que fue desgranada ayer en la primera junta general de accionistas presidida por Christian Streiff, nuevo patrón de la compañía.
Para Streiff, la 'obsesión debe ser la productividad', con el objetivo de 'volver al crecimiento y a la rentabilidad', lo que pasa 'inevitablemente por la reducción de costes'. El reciente anuncio de la supresión de 4.800 empleos en Francia va en este sentido. Otros anuncios de la misma naturaleza seguirán, sin por ello querer lanzarse en un plan de reestructuración en toda regla, 'porque desmotivaría la comercialización de nuevos modelos' y lanzaría una señal negativa al mercado. Streiff no quiso ayer excluir el cierre futuro de alguna de las fábricas de la marca en Europa. 'Nunca puede decirse nunca jamás', si bien precisó que 'resulta más eficaz reducir los costes fijos de cada fábrica que cerrar una'.
De mantener el calendario en la reducción de costes, la empresa estará en medida de mantener el ritmo de ahorro de 600 millones de euros anuales para compensar el alza de las materias primas. En esta misma línea de ahorro, la política de compra de materiales de Peugeot se ha fijado el objetivo de ganar el 6% de productividad anual, frente al 4% en la actualidad, lo que pasará por comprar masivamente en los países con costes más bajos.
Una mayor rapidez en la creación de modelos dará un empujón a Peugeot en el mercado. La marca asumirá más riesgos en la fase de investigación de un vehículo, reduciendo en un tercio el tiempo de su desarrollo.
Streiff arremetió de frente contra la política monetaria europea, la cual 'va contra el mantenimiento del tejido industrial en Europa', en un contexto de extrema fortaleza del euro, lo que debilita las exportaciones. Además, la situación actual del dólar y del yen 'es terrible para el mercado europeo, ya que abre la puerta a todas las importaciones a precios invencibles'.
41 nuevos modelos hasta 2010
El estricto plan de adelgazamiento para rebajar costes no impedirá, según las previsiones, que PSA Peugeot Citroën ponga en marcha un ambicioso plan de lanzamiento de nuevos modelos. Algo muy parecido a lo que en febrero de 2006 anunció el presidente de Renault, Carlos Ghosn. El presidente de PSA, Christian Streiff, no obstante, es más agresivo. Para 2010, la compañía deberá contar con 41 nuevos modelos en el mercado, para lo cual va a añadir seis nuevos modelos al plan actual. Este incremento deberá conseguirse mediante una aceleración del proceso de desarrollo de los coches.Uno de estos nuevos modelos será el C4 sedán, que el fabricante presentará por primera vez en el Salón Internacional del Automóvil de Barcelona, que tendrá lugar entre el próximos 8 y el 17 de junio. El coche llegará a los concesionarios españoles durante el tercer trimestre del año.La marca francesa también aprovechará la muestra barcelonesa para la presentación nacional de su nuevo todoterreno, el C-Crosser, que llegará a España después del próximo verano.