El Ibex toca máximos por el impulso de las constructoras
La Bolsa española coquetea con los 15.100 puntos. Los movimientos empresariales volvieron a animar el mercado ayer y el Ibex llegó a tocar los 15.158,5 puntos por primera vez. La marca, eso sí, resultó algo efímera, ya que las compras se desinflaron a última hora y el índice concluyó con una caída del 0,09% que lo dejó en 15.055,5 puntos, a sólo 25,4 del cierre más alto de su historia.
La Bolsa española sigue conquistando nuevas metas. Los analistas empiezan a hablar de cierto mal de altura por las valoraciones que están alcanzando algunas compañías, pero de momento la confianza del mercado persiste y el Ibex pulveriza un récord tras otro.
La enorme liquidez que abunda en el mercado, la fortaleza de los resultados empresariales constatada en la última campaña y los incesantes movimientos empresariales continúan dando combustible al mercado. Los inversores miran de lado cualquier noticia negativa como la fortaleza del crudo y los avances, aunque con timidez, se suceden.
El sector constructor y el energético, de nuevo en las quinielas de los inversores por expectativas de concentración, volvieron a situarse en los puestos de cabeza ayer, repuntes que permitieron al índice tocar los 15.158,5 puntos por primera vez en su historia. Las compras, eso sí, no lograron afianzarse y al cierre de la sesión el Ibex cayó un 0,09%, que lo dejó en los 15.055,5 puntos, es decir a tan sólo 25,4 del máximo al que cerró el 20 de abril cuando concluyó la jornada en los 15.080,9 puntos.
El Ibex recorta distancias con Europa y gana ya un 4,7% en mayo
El repunte del 5,25% de Acciona, impulsado por una recomendación de compra de Citigroup en la que fija el precio objetivo de la compañía en 240 euros por título, la convirtió en la protagonista indiscutible de la sesión. La acción concluyó en 189,5 euros, lo que implica que en seis sesiones gana el 18,7% y para Citigroup aún tiene un potencial de revalorización adicional del 26,7%.
La banca también se vio favorecida en un principio. La compra de Capitalia por parte de Unicredito animó al sector al acentuar las expectativas de concentración, aunque con el paso de las horas los avances se desinflaron. Banco Popular, en las quinielas de muchos para protagonizar el próximo movimiento, sí mantuvo las alzas y al cierre se anotó el 1,33%.
En Europa la sesión dibujó una trayectoria similar y los resultados mixtos se impusieron. El Dax subió el 0,15%, el Cac perdió el 0,18% y el Euro Stoxx se dejó el 0,34% en una jornada en la que destacó el repunte del sector de materias primas (+2,1%), petroleras (+1,24%) y químicas (+1,16%).
La Bolsa italiana fue la única que se desmarcó al caer el 1,57%, por la debilidad que mostró el sector bancario tras conocerse dos operaciones de calado, la compra de Capitalia por parte de Unicredito y la de Popolare dell'Emilia Romagna por parte de Banca Popolare. El índice también se vio castigado ya que la mitad de los valores pagaron dividendo. El castigo del 5,74% que sufrió Unicredito hubiera quedado en un 2,8% sin este efecto.
El Ibex, entretanto, aprovechó para reducir distancia con Europa. La caída de ayer supuso romper con cuatro avances consecutivos, aunque el alto en el camino fue más bien testimonial tras encadenar tres semanas al alza. El pánico vendedor que desató Astroc a finales de abril parece superado. Entonces el Ibex perdió el 4,7% en algo más de una semana mientras Europa continuaba cosechando avances, una diferencia que se estrecha por momentos.
En mayo el Ibex gana ya el 4,7% mientras que el Euro Stoxx tan sólo sube el 1,67% en el mes, lo que deja la ganancia anual de la Bolsa española en el 6,4% frente al 8,38% del Euro Stoxx. Los expertos, con todo, llaman a la cautela y aún ven más riesgos de caídas que avances.