Bruselas revoca la adjudicación del proyecto Galileo a ocho empresas

El comisario europeo de Transportes, Jacques Barrot, anunció ayer que revocará la adjudicación del proyecto Galileo a las ocho empresas (entre ellas las españolas Hispasat y Aena) que ganaron el concurso en 2005. La decisión responde a la negativa del consorcio empresarial a asumir los riesgos comerciales ligados al lanzamiento del sistema europeo de navegación por satélite. Bruselas convocará un nuevo concurso pero sólo para la gestión de Galileo cuando entre en funcionamiento.

Barrot quiere que, a partir de ahora, el erario público, que ya ha gastado 2.500 millones de euros en el desarrollo de los sistemas comunitarios de navegación, asuma todo el coste de una infraestructura llamada a competir con el GPS estadounidense a partir de 2012.

El comisario plantea dos posibilidades: que el presupuesto comunitario asuma la nueva factura, de unos 2.400 millones de euros, o que la sufraguen los Estados miembros en partes proporcionales.

'Sólo son 400 millones al año', intenta minimizar el fiasco Barrot. Aún así, tendrá difícil convencer a países que como el Reino Unido u Holanda temieron desde el principio que el supuesto proyecto industrial acabase siendo financiado por el Estado.

'Los cálculos de la UE tal vez fueron optimistas', reconoce el documento aprobado ayer por la Comisión. 'El mercado para las empresas concesionarias presenta incertidumbres (...) y este elemento fue claramente minusvalorado en el proyecto original'. También 'se subestimó', añade el documento, 'la complejidad técnica de Galileo'. Sin duda.