Remitido a la Audiencia el caso de la Caja de Alcoy abierto en 1989
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Alcoy ha remitido a la Audiencia de Alicante los autos del caso de la Caja de Crédito de Alcoy por insolvencia punible y apropiación indebida para celebrar juicio oral, informan fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
La causa se ha incoado contra 11 antiguos gestores de la entidad por el presunto delito de insolvencia punible, societario y de apropiación indebida, tras la querella por quiebra fraudulenta que presentaron unos mil afectados por la suspensión de pagos de la entidad bancaria en 1993 y su posterior declaración de quiebra en 1999.
Los clientes de la Caja de Crédito de Alcoy no pudieron recuperar sus depósitos, cifrados en 3,6 millones de euros, ya que la entidad no estaba incluida en el Fondo de Garantía de Depósitos. Después de tramitarse por el procedimiento abreviado y practicarse las diligencias oportunas para el esclarecimiento de los hechos y su calificación, el juez ha dictado un auto en el que da por concluida la instrucción y acuerda el traslado de la causa y las piezas separadas de convicción a la Audiencia Provincial para que se señale la vista oral. La resolución ahora dictada no es firme y contra ella cabe recurso de reforma.
Este caso surgió en 1989, cuando el Banco de España abrió un expediente sancionador contra la Caja de Crédito de Alcoy por el que inhabilitó durante cinco años para el ejercicio de su cargo a su entonces director general, Jesús Llopis, quien, sin embargo, siguió en ese puesto gracias a los recursos presentados. En 1993, Llopis y su sobrina Mercedes Llopis, entonces subdirectora de la institución, fueron denunciados por los supuestos delitos de estafa y falsedad de documento mercantil, después de detectar el Banco de España presuntas irregularidades en la gestión.