Sacyr, el atractivo del riesgo
Los expertos destacan el interés estratégico de la opa a Eiffage y también las incertidumbres
No es que consideren que el intento de toma de control de la constructora francesa Eiffage por Sacyr carezca de sentido estratégico, pero afirman que el riesgo de la operación es elevado. Esta es una opinión compartida por gestores y analistas, quienes se muestran cautos sobre el impacto de ese movimiento en la futura cotización del grupo que preside Luis de Rivero. No obstante, el consejo más generalizado a los accionistas de la empresa española es mantenerse en el capital a la espera de acontecimientos. De momento, la reacción del mercado bursátil es tranquila. El viernes cerró a 45,03 euros, con una subida del 0,40%. El jueves, día que anunció la opa a Eiffage, rebotó un 2,82%.
'Creo que la estrategia de Sacyr es agresiva y que la empresa está bastante endeudada, pero las operaciones que emprende estén muy estudiadas', señala Jordi Padilla, director de renta variable de Atlas Capital. A su juicio, este movimiento se encuadra dentro de la política seguida por Luis del Rivero con el objetivo de diversificarse, tanto en actividades como en lo referente a mercados geográficos. 'Si todo va bien, el impacto en resultados puede ser espectacular', agrega.
Padilla, al igual que otros expertos, manifiesta que uno de las metas más claros de la opa sería hacerse con APRR, la concesionaria de autopistas de Eiffage. Añade que esa sociedad la fusionaría con su filial de la misma actividad, Itinere, para sacar después el grupo resultante a Bolsa. 'De esa forma podría constituir una compañía con un valor entre 7.000 a 10.000 millones de euros, y obtener significativos ingresos por la venta en Bolsa de un 30% o un 40%', subraya.
Con esa transacción conseguiría otra ventaja: reforzarse en una actividad, como es autopistas, que tiene ingresos recurrentes y que no está relacionada con el ciclo de la construcción.
Juan Solana, analista de Intermoney Valores, subraya, asimismo, que la operación tiene un fuerte componente estratégico a largo plazo. Pero afirma que la opa a Eiffage corre el riesgo de no conseguir sus objetivos, tanto en lo que se refiere a la obtención de 60% del capital como a lograr derechos de voto. 'Se puede enfrentar a un tema complejo, si no consigue esos derechos: tener una gran cantidad de dinero inmovilizada sin grandes beneficios'.
No obstante, añade que puede optar, como ha hecho en otras ocasiones, por vender y hacer plusvalías. 'Pero no se sabe cómo cotizará Eiffage en el futuro. æpermil;sa salida con éxito tampoco está asegurada', asevera. Otra cuestión que destaca es que el precio puede ser algo elevado, ya que Eiffage, como otras empresas, cotizan en niveles altos por la evolución de los mercados bursátiles.
Desde Inverseguros se señala que la ampliación de capital que Sacyr llevaría a cabo tendría un carácter dilutivo para el valor. Por otro lado, UBS ha reducido su recomendación sobre la constructora española de neutral a reducir, pero sube el precio objetivo a 42,70 euros por título.