Sacyr podrá vetar los blindajes antiopa que propone Eiffage
Sacyr y su participada Eiffage saldan hoy la pugna por el poder en una junta clave. El grupo español podrá vetar las medidas antiopa que propone el presidente de la constructora francesa, Jean-François Roverato. Mientras, la Caisse des Dépôts, tercer accionista, ratificó ayer su apoyo al bloque anti-Sacyr y le pidió que desvele sus 'intenciones' de control.
El final de la junta de Eiffage hoy significará el principio de una nueva política de Sacyr en su participada francesa bien para reforzar su poder como primer accionista (con el 33,2%) bien para salir con jugosas plusvalías. Las dos partes se han cuidado mucho de desvelar la composición global de fuerzas en una asamblea en la que Sacyr intentará superar el bloqueo para entrar en el consejo. De fondo, subyace la amenaza de Eiffage de denunciar una concertación española.
Con el respaldo del presidente de Inmocaral, Luis Portillo (con algo más del 2%) y la inmobiliaria manchega Rayet (con un 4,21%) la constructora española -con el voto limitado al 29%- tiene la vía abierta para vetar una de las partes importantes de la junta: las medidas de blindaje que ha propuesto Roverato en caso de una opa. Entre ellas figuran la emisión de bonos convertibles o la asignación de acciones gratis a empleados y directivos.
Con en torno al 35% de derechos de voto, el grupo que preside Luis del Rivero rompería la mayoría reforzada de dos tercios que requieren esta batería de medidas antiopa por incluirse en la parte extraordinaria de la junta.
Enfrente, el núcleo opositor cuenta con aproximadamente el 39%, con lo que las fuerzas pueden presentarse muy igualadas. Sacyr necesitaría algo más de un 4% de derechos políticos para superar el veto que ya sufrió en la junta de hace un año. Y ahora falta por ver qué más apoyos de promotores inmobiliarios españoles, que anunció Eiffage pero no desveló. Se destapan hoy.
Sólo si logra superar la mayoría del bloque francés formado por los empleados, los directivos y la Caisse des Dépôts (ver gráfico adjunto), podrá designar a los cinco consejeros propuestos. Y es que estos nombramientos que el consejo rechaza figuran en la parte ordinaria de la junta que requiere sólo una mayoría simple.
Campaña para minoritarios
La Caisse des Dépôts, el tercer accionista tras Sacyr y los empleados, recordó ayer a la quinta constructora española que apoya a la dirección del grupo galo, algo que no coge por sorpresa dado que el Estado francés controla la entidad. La caja, además, instó a Sacyr a 'desvelar claramente sus intenciones' sobre la toma de control de la tercera constructora gala. Hace semanas la acción se disparó por rumores de opa.
La española, por su parte, ha intentado captar el respaldo de los accionistas minoritarios con una campaña de publicidad en la prensa francesa en los últimos días en la que ratifica su apoyo a la estrategia de Eiffage y su intención de contribuir al desarrollo del grupo francés.
Rayet llega a la junta con el voto recortado
Las estratagemas de Eiffage para impedir que Rayet acuda a la junta con todos sus derechos de voto mantienen perplejos a los directivos de la inmobiliaria española. Tras varios días de boicot, a última hora de ayer este grupo seguía con los derechos políticos recortados, aunque del 80% del día anterior bajó al 5%, según explicaron fuentes de la empresa.Si a primera hora de hoy, el banco que expide los certificados de la participación por encargo de Eiffage, BNP Paribas, no atiende a las reclamaciones de Rayet, esta compañía sólo votará por el 4%, un 0,21% menos. Vista la proporción de fuerzas posible cualquier porcentaje mínimo puede ser vital para luchar contra el veto de Roverato a Sacyr. La inmobiliaria de Félix Abánades amenaza con acciones legales si no puede votar según su participación.Siguiendo con el boicot, Eiffage también intenta impedir que accedan a la junta hoy la mayor parte de medios económicos españoles.