La CE prohíbe una ayuda pública belga a General Motors
La Comisión Europea prohibió ayer una ayuda pública de 3,15 millones que la región flamenca de Bélgica quería otorgar a la fábrica de General Motors en Amberes para formación relacionada con el lanzamiento de nuevos modelos. La institución consideró que podría distorsionar la competencia entre las fábricas de diferentes Estados miembros. Por lo tanto, la CE considera que es contraria a la legislación comunitaria.
Bruselas cree que la formación ligada al lanzamiento de nuevos modelos y a la fabricación de nuevas piezas de carrocería entra dentro de los gastos de funcionamiento que deben asumir los fabricantes de coches por sí mismos. Como el Gobierno aún no ha pagado, GM no tiene que devolverla.
Sin embargo, la Comisión Europea sí que autorizó otro tramo de subvenciones estatales por valor de 2,18 millones de euros porque se destinarán a acciones formativas más generales y al aprendizaje de competencias que faltan en el mercado laboral flamenco.