Las subvenciones públicas a los partidos aumentarán el 20% el año que viene
La reunión de la ponencia parlamentaria que aborda la reforma de la financiación de los partidos políticos alumbró ayer dos novedades: el aumento en un 20% de las subvenciones públicas que estas formaciones recibirán el año que viene, hasta un total de 82 millones, y la elevación hasta los 100.000 euros de las cantidades que los particulares o las empresas podrán entregar anualmente a los partidos.
Las enmiendas incorporadas ayer a la ponencia fijan en 78 millones de euros las asignaciones públicas para los partidos en 2008, cifra a la que hay que sumar otros cuatro millones para sufragar los gastos de seguridad, derivados en su mayor parte de la amenaza terrorista. Este aumento del 20% en estas dotaciones fue criticado por el PP, formación política que queda descolgada del acuerdo trabajado desde hace meses por el resto de los partidos en torno a la reforma de la ley de financiación que data de 1987.
Para eludir que el Tribunal de Cuentas pueda llegar a fiscalizar los ingresos y gastos de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) ajenos a las subvenciones públicas, el PP pidió ayer un dictamen a los servicios jurídicos del Congreso en el que solicita que expongan los criterios por los que cabe deducir que una fundación está vinculada orgánicamente a un partido político.
El diputado del PP Vicente Martínez Pujalte niega que FAES, presidida por el ex presidente José María Aznar, esté vinculada orgánicamente al PP. Se trata de un contencioso que enfrenta a este partido con el PSOE, formación que defiende que las fundaciones ligadas a los partidos sean sometidas a los mismos controles y fiscalización que estos últimos.
Hay consenso unánime en las diferentes fuerzas políticas sobre la prohibición de las donaciones anónimas y en el régimen fiscal que se plantea en la reforma para los donantes y sus destinatarios. Las deducciones y, en su caso, las exenciones, afectan al IRPF, al Impuesto sobre Sociedades, y al Impuesto sobre Bienes Inmuebles.
Confidencialidad
La ponencia introdujo también ayer otra enmienda que obliga al Tribunal de Cuentas 'al más estricto y completo sigilo' sobre los datos, informes o antecedentes que afecten a la intimidad de las personas y que lleguen a su poder en el ejercicio de la función fiscalizadora que le otorga la ley. También se establece prioridad y se concede carácter de urgencia a los recursos que se tramiten ante la jurisdicción contencioso administrativa contra las sanciones del Tribunal de Cuentas que supongan la rebaja o el no libramiento de las subvenciones anuales que reciben los partidos para sus gastos de funcionamiento.
El diputado socialista Francisco Fernández Marugán dio a entender ayer que la reforma será aprobada en todo caso, aunque no cuente con el respaldo del PP. Los grupos parlamentarios tienen de plazo hasta el próximo 13 de abril para presentar nuevas enmiendas y éstas serán debatidas en la fase de comisión una semana más tarde antes de llegar al pleno.