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Finanzas

BBVA está preparado para nuevas compras

El presidente de BBVA, Francisco González, aseguró el viernes que la entidad cuenta con suficiente 'músculo financiero' para afrontar nuevas compras. De momento, el banco digerirá sus últimas adquisiciones en EE UU y China, pero sin dejar escapar posibles oportunidades de crecimiento.

Francisco González, presidente del BBVA
Francisco González, presidente del BBVATXETXU BERRUEZO

Somos un grupo 'joven, con enorme vitalidad' y con 'tremenda' potencia para conseguir un futuro todavía 'más brillante', afirmó el presidente de BBVA. Francisco González aseguró a los asistentes a la junta de la entidad, celebrada el viernes en el Palacio de Euskalduna de Bilbao, que 'lo mejor aún está por llegar'.

El presidente explicó que el salto dado por la entidad en tamaño en los últimos años es sólo el principio. 'Ahora aspiramos a que BBVA sea un grupo de alcance global', explicó. El banquero señaló que la entidad cuenta con el 'músculo financiero' suficiente para afrontar nuevas compras, aunque de momento dedicará todos sus esfuerzos a digerir las últimas adquisiciones en EE UU y Asia. Presumió de haber conseguido sellar la compra de Compass, al que definió como 'la mejor franquicia; la más atractiva' y la de más 'calidad' de EE UU.

La operación, que se cerrará a finales de año, se explicará con más detalle en la junta general extraordinaria que celebrará el banco este año, una vez cuente con los permisos de todas las autoridades.

China es otra de las oportunidades para BBVA. Su desembarco en Citic Group le abre, según González, la puerta a un mercado importante y que está listo a las privatizaciones, 'a las que estaremos atentos'.

Hasta ahora, el banco español ha invertido 1.000 millones de euros en Asia y piensa destinar este ejercicio otros 1.000 para aumentar su posición. 'Trabajaremos muchos años con nuestros socios en China' vaticinó.

González aprovechó la junta para sentar los cimientos del futuro del banco, que estará basado en tres pilares: principios, innovación y globalidad. Su objetivo es convertir a la entidad en uno de los pocos 'no más de ocho o diez' grandes grupos de la industria financiera. 'Queremos ser globales porque en el mundo hay grandes oportunidades de crecimiento', afirmó el primer ejecutivo de BBVA. Y la entidad no está dispuesta a dejar escapar estas oportunidades.

Sobre el futuro de la cartera industrial, González insistió en que sus participadas son puramente financieras. Con la venta de Iberdrola, aseguró en respuesta a un accionista, 'vamos a sacar más partido financiando la compra de Compass que siendo accionistas pasivos'.

Durante la junta, el presidente dedicó poco tiempo al balance de 2006, que calificó de 'excelente' y, menos aún, a glosar algo de la historia de una entidad nacida en Bilbao hace ahora 150 años. Apenas cinco líneas dentro de un discurso que duró más de 35 minutos.

Los accionistas aprobaron el nombramiento de Rafael Bermejo como nuevo consejero independiente. Bermejo sustituye a Ricardo Lacasa, que abandona el órgano de gobierno por jubilación. También se ratificó la renuncia de Ángel Vilá, representante de Telefónica en el consejo.

Por delante de Santander en la liga de los grandes

El patrocinio de la Segunda División española, la denominada ahora Liga BBVA, ha calado en el discurso de los gestores de la entidad financiera. A la afirmación de un accionista que tirando de sus datos colocó a BBVA por detrás de Popular y Santander en rentabilidad a lo largo de estos últimos años, González se defendió recurriendo a términos empleados en el mundo del fútbol y del deporte en general. 'Es verdad que Popular es más rentable, pero juega en otra liga', dijo el presidente del banco vasco. Y abundó en el tema. 'Respecto a lo que usted dice sobre Santander está equivocado. En la liga de los quince, la de los bancos más grandes del mundo, nosotros somos más rentables tal y como está demostrado'. En esta particular competición, BBVA pretende aplicarse estos próximos ejercicios para ascender puestos.

Críticas a la remuneración del presidente del grupo

Dos accionistas aprovecharon su intervención durante la junta para lanzar fuertes críticas sobre la remuneración percibida por Francisco González en 2006 y el blindaje con el que cuentan los tres consejeros ejecutivos del grupo. En 2006, el presidente de BBVA percibió entre sueldo y bonus 9,78 millones de euros, a lo que se suman los 53,2 millones acumulados en compromisos por pensiones. Estas cantidades fueron calificadas por uno de los accionistas de 'repugnantes'. González explicó que 'las remuneraciones de BBVA están en línea con lo que está pasando en el resto del mundo'. Tres representantes sindicales pidieron al presidente del banco que premie a la plantilla con la entrega de acciones o efectivo con motivo del aniversario de la entidad. En total, intervinieron 14 accionistas, la mayoría a favor del equipo gestor de BBVA.

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