El gas argelino se encarece para España
El trato preferencial y los otros favores otorgados a países llamados amigos van a ceder su lugar a una realpolitik gasista. La del mercado (...).
Argelia finalmente se ha dado cuenta de que, de ahora en adelante, no debe abrir sus compuertas para regar España, Francia y otros países europeos si no tiene a cambio alguna ventaja política y diplomática. Hay un hecho comprobable: los favores argelinos a sus clientes no han sido bien recompensados diplomáticamente. No hay más que ver las posturas de España y de Francia con respecto al problema del Sahara Occidental para darse cuenta de esta colaboración improductiva.
Además, es significativo el hecho de la llegada el martes a Argelia del Rey de España en un momento en el que Argelia está negociando con el Gobierno de Zapatero el incremento en el precio del gas. Es posible que Su Majestad intente reparar las torpezas diplomáticas de su presidente en lo que respecta a la posición del reino de España frente al tema saharaui (...).
A través de la riqueza gasística, Argelia dispone en todo caso de una verdadera arma energética de disuasión. El acuerdo histórico cerrado entre Sonatrach y Gazprom en agosto de 2006, que ha hecho temblar a Europa, habrá servido de chispa.