El aeropuerto de Huesca, a punto de despegar
El aeropuerto de Huesca-Pirineos, abierto para vuelos de prueba desde el 21 de diciembre, ha dado un paso más hacia su apertura comercial. Endesa acaba de finalizar la construcción de su subestación eléctrica, proyecto que ha contado con un presupuesto de 2,5 millones de euros, financiado por AENA. La inversión total de las actuaciones en el nuevo aeropuerto supera los 42 millones.
Aunque todavía no se ha establecido una fecha oficial, el nuevo aeropuerto Huesca-Pirineos debería acoger los primeros vuelos directos al corazón del Pirineo Aragonés en las próximas semanas, una buena noticia para las estaciones de la zona.
'Es muy positivo para todas las estaciones del Pirineo aragonés', explica Jaime Río Gonzalo, responsable de marketing de Cerler. 'Es bueno tanto para el turismo de invierno como para el de verano', añade, recordando la oferta turística de los valles aragoneses.
Las estaciones esperan sobre todo que la nueva infraestructura potencie la llegada de extranjeros. 'Vienen muchos esquiadores de Madrid', explica Gonzalo. 'Con el aeropuerto podría acercarse también un público nuevo como por ejemplo el británico', añade.
El impacto del aeropuerto, que tras el de Zaragoza será el segundo de la región aragonesa, sobre el sector de la nieve depende esencialmente de la apuesta de las aerolíneas. De momento, ninguna de las grandes compañías tiene ningún vuelo previsto a Huesca.
Sólo Pyrenair, creada para operara desde Huesca, tiene previsto iniciar líneas regulares con Madrid y Barcelona. La compañía, financiada por Eolos aviación, la Fundación para el desarrollo Socioeconómico de Alto Aragón y la Cámara de Comercio de Huesca, tendrá su domicilio social en el mismo aeropuerto y ofrecerá también vuelos bajo demanda.
La nueva aerolínea, presidida por Hugo Puigdefábregas, fletará aviones de cuatro reactores con capacidad para acoger 80 viajeros. El trayecto entre Huesca y Madrid se podrá realizar en 30 minutos y 20 minutos bastarán para alcanzar Barcelona.