La Bolsa china sufre la mayor caída de los últimos 21 meses
Los mercados de valores de Shanghai y Shenzhen han sufrido hoy un desplome del 7,2% al cierre, la mayor ocurrida en un solo día en los últimos 21 meses. Esta caída ha extendido el temor a una posible burbuja especulativa en la Bolsa china, que hasta ahora había registrado un buen comportamiento. El Indice 300 de Shanghai y Shenzhen, que registra las acciones en yuanes presentes en los dos mercados, bajó 182,65 puntos, lo que supone la mayor caída que se produce desde abril de 2005 y una reducción de las ganancias de este mes del 16%.
De acuerdo con el Indice Compuesto de Shanghai, la caída fue algo menor, del 4,92% (144,22 puntos). "El índice parece haber llegado a su máximo la semana pasada. Es bastante poco probable que alcance en un plazo breve los 3.000 puntos", ha declarado un analista de Haitong Securities.
"Muchos inversores sintieron el impulso de recuperar su dinero, ya que incluso valores como bancos están cotizando en valores muy altos", comentó otro experto. El valor de China Vanke, la mayor inmobiliaria presente en Bolsa, se desplomó un 9,9% y se situó en 15,23 yuanes (unos 1,52 euros), mientras que China Merchants Bank, el tercer mayor acreedor del país y que hace apenas un par de semanas anunció un aumento de sus beneficios del 50 por ciento en 2006, cayó un 7,1%, para colocarse en 17,15 yuanes (1,75 euros). Citic Securites, la principal correduría del país, perdió un 3,48 yuanes (un 9,2 por ciento) y se situó en 34,19 yuanes (3,5 euros).
Sólo el 30% de las compañías presentes en el mercado de Shanghai están listas para invertir de acuerdo con los estándares occidentales, y los inversores del 70% de las empresas que cotizan perderán con probabilidad dinero, según señaló ayer en Dubai el vicepresidente de la Asamblea Popular Nacional (parlamento), Cheng. "Todos los inversores se creen que pueden ganar. Pero muchos terminarán perdiendo", advirtió.
Los obstáculos a la banca, entre las causas de la caída
La repentina caída estaría íntimamente relacionada con la decisión de esta semana de la comisión reguladora bancaria de prohibir a los bancos que concedan préstamos para la compra de vivienda cuando se sospeche que su fin último es la especulación y la inversión en Bolsa, en la que se cree que será sólo una de las diversas medidas previstas por Beijing para enfriar el mercado de valores.
Si los inversores chinos quieren estar preparados para las previsibles fluctuaciones del mercado, señaló un analista citado por la agencia Xinhua, lo más recomendable será que vendan parte de sus acciones para asegurarse beneficios.